Redacción. El consumo de licuados a base de frutas ha crecido en popularidad en los últimos años, gracias al interés por opciones alimenticias saludables y fáciles de preparar. Entre estas bebidas, el licuado de mora se destaca por su alto valor nutricional y sus múltiples beneficios para la salud, siendo una alternativa deliciosa y versátil para toda la familia.
Uno de los principales beneficios del licuado de mora es su aporte de fibra. Según la Fundación Española de Nutrición (FEN), las moras contienen aproximadamente 7 gramos de fibra por cada 100 gramos, lo que favorece la regularidad intestinal y genera sensación de saciedad. La fibra soluble presente en esta fruta también puede contribuir al control de los niveles de azúcar en sangre, ayudando a personas con diabetes o resistencia a la insulina a mantener una glucemia más estable, señala la Cleveland Clinic.
Las moras son ricas en antocianinas, pigmentos naturales responsables de su color característico. Estas sustancias presentan actividad antioxidante, protegiendo las células frente al daño oxidativo producido por los radicales libres. Este efecto puede reducir el riesgo de enfermedades crónicas, incluyendo padecimientos cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer, según expertos en salud.
El licuado de mora también es una fuente importante de vitamina C, que contribuye al correcto funcionamiento del sistema inmunológico y mejora la absorción de hierro de los alimentos vegetales. Además, la combinación de vitamina C y compuestos fenólicos presentes en la fruta favorece la producción de colágeno y ayuda al organismo a responder mejor frente a infecciones, de acuerdo con la FEN.
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Beneficios cardiovasculares
El consumo regular de moras puede favorecer la salud del corazón. Las antocianinas ayudan a inhibir la oxidación del colesterol LDL, mientras que su bajo índice glucémico contribuye a controlar los niveles de azúcar en sangre. WebMD señala que estas propiedades, combinadas con la fibra soluble, pueden reducir el colesterol total y los triglicéridos, promoviendo un perfil cardiovascular más saludable.

Opciones de preparación y valor nutricional
El licuado de mora puede prepararse con diferentes líquidos, según las necesidades nutricionales:
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Con leche: aumenta el contenido de proteínas, calcio y vitaminas, siendo ideal para quienes buscan un aporte completo de nutrientes.
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Con agua: resulta bajo en calorías y grasas, adecuado para dietas ligeras o restricciones en productos de origen animal.
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Con bebidas vegetales (soja, almendra, avena): alternativa vegana o para quienes presentan intolerancia a la lactosa; el contenido de proteínas y calcio depende del tipo y grado de fortificación.
Una porción estándar de licuado (aproximadamente una taza de moras frescas, 150 g) aporta cerca de 39 kcal, 7 g de fibra, 15 mg de vitamina C, 36 mg de calcio, 20 µg de vitamina K y 160 mg de potasio, según la FEN. Añadir ingredientes como plátano, espinacas, semillas de chía o frutos secos puede enriquecer aún más el contenido nutricional, aumentando proteínas, grasas saludables y micronutrientes esenciales.
Cómo preparar un licuado de mora saludable
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Seleccionar moras frescas o congeladas y enjuagarlas antes de usar.
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Elegir la base líquida: agua, leche, bebida vegetal o yogur.
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Añadir ingredientes opcionales como plátano, espinaca, semillas o frutos secos.
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Incorporar endulzante al gusto, aunque las moras aportan dulzor natural.
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Licuar hasta obtener una textura homogénea y suave.
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Servir inmediatamente para conservar el contenido vitamínico y la frescura.
En conclusión, el licuado de mora no solo es una bebida deliciosa y refrescante, sino también un aliado para la salud digestiva, cardiovascular e inmunológica. Su versatilidad permite adaptarlo a distintos estilos de vida y necesidades nutricionales, convirtiéndolo en una opción diaria para quienes buscan cuidar su alimentación de manera sencilla y nutritiva.
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