SABANAGRANDE, HONDURAS. El cuerpo mutilado de un hombre fue encontrado en un acantilado, en Sabanagrande, departamento de Francisco Morazán, en el centro del país.
Unos pobladores de la comunidad de Los Chorros, que buscaban leña, fueron quienes dieron con el macabro hecho, y de inmediato alertaron a las autoridades.
Decapitado
Una vez que llegó la Policía Nacional, se descubrió que al cuerpo le faltaba la cabeza y tenía un brazo cercenado. Los agentes hicieron un rastreo en la zona para hallar la parte faltante del cadáver, pero no la encontraron por ningún lado.
A la escena del crimen se presentó el padre de la víctima, quien dijo que su vástago respondía al nombre Franklin Josué Zelaya Vásquez, de 26 años de edad.
Fue a una fiesta
Según él, su hijo le comentó el sábado 1 de mayo que tenía planes de asistir a una fiesta, por lo que en la noche de ese mismo día, salió. Esa sería la última vez que alguien vería con vida a Franklin.
Las horas pasaron y Zelaya Vásquez no regresó a su casa. Su padre se empezó a preocupar. Tenía la esperanza de encontrarlo vivo, pero hoy le informaron que estaba muerto.
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Sin pistas
Según el informe preliminar, los criminales le habrían cortado primero la cabeza y luego arrojaron el cuerpo al acantilado. Hasta el momento, se desconoce quiénes le quitaron la vida al hondureño, así como el motivo del dantesco hecho.
De su lado, el padre de la víctima pide que se haga justicia y que la muerte de su hijo no quede en la impunidad.
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