YORO, HONDURAS. Las empresas de transporte, Tupsa y Catipsa, han sido atacadas por la extorsión, por lo que han decidido paralizar sus labores para evitar pérdidas de vidas humanas.
Estas unidades que cubren la ruta de El Progreso-San Pedro Sula decidieron no trabajar, porque según dicen, no pueden seguir con la misma situación.
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Se conoció por parte de medios locales que los conductores de esta ruta recibieron una nota y un celular con un mensaje amenazador.
«Ellos (policías) vienen un día pero no vuelven. Sólo en el momento que pasan las cosas, después no aparecen. Necesitamos más seguridad, por favor, ya es necesario que hagan algo definitivo», manifestó un afectado.
Otro ciudadano añadió que ellos están de acuerdo en que las autoridades hagan operativos.
«Imagínense que nos vayan a matar. Los dueños de las unidades nos dicen que si trabajamos es bajo nuestra responsabilidad», mencionó.
Esta no es la primera ocasión que esta empresa de transporte decide paralizarse por problemas con la extorsión.
Este flagelo ha venido afectando a la ciudadanía a través de los años y en lugar de disminuir, va aumentando.
Cinco mil de extorsión cobraba transportista
En otro hecho, funcionarios policiales capturaron el miércoles 26 de abril a un transportista que supuestamente cobraba extorsión a sus propios compañeros.
El reporte policial indica que la operación la desarrollaron en el barrio El Centro, de Tela, Atlántida.
Las autoridades, además, detallaron que recibieron una denuncia y gracias a ello lograron aprehender a alias «El Chele», de 24 años de edad, originario de Jutiapa, en el mismo departamento.
Según el informe policial, «El Chele» se dedica al rubro de transporte y atemorizaba a sus compañeros cobrándoles extorsión hasta por 5,000 lempiras.