REDACCIÓN. El alpinista Ronald Quintero, el primer hondureño en escalar el monte Everest, brindó una magistral conferencia en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), en Tegucigalpa, donde aprovechó para enviar un mensaje de aliento a la población.
«Lo hemos logrado, los catrachos podemos, quiero aprovechar para enviar el siguiente mensaje: Quiero que juntos pintemos una nueva cara de esperanza y a través de ello, mostremos nuestras grandezas. Gracias a todos lo que creyeron en mí, que todo es posible, esta cumbre va dedicada a mi bello país, Honduras», es el mensaje que brindó Quintero tras alcanzar el pináculo del mundo, en el Monte Everest, con 8,848 metros de altitud, cumbre donde colocó la bandera de Honduras.
«Honduras en las alturas», es parte del mensaje satelital escrito y enviado desde la cumbre más alta del mundo. Esa misma frase fue el lema de la conferencia ¿Cómo llegar a la cima? en la UNAH.
La extraordinaria hazaña de alta montaña inició un 6 de abril, cuando Quintero se desplaza a los pueblos de Nepal. “El primer desafío que tuvimos, fue tomar un vuelo en helicóptero de la ciudad de Kamandu hasta el pueblito Lukla, donde está un aeropuerto muy peligroso con alrededor de 500 metros de aterrizaje”, señaló el escalador.
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Aventura de montaña
A partir de ese momento comienza esta aventura de montaña con más de 4,000 metros de altitud. Desde ese punto recorrieron durante ocho días de camino para llegar al campamento base del Monte.
Luego de un ritual espiritual previo, conocido como Puja, de respeto con la montaña, para después comenzar los entrenamientos del 21 de abril al 2 de mayo en cataratas de hielo, escaladas ascendiendo picos de seis mil metros, “estas prácticas son súper importantes y se requiere utilizar dispositivos configurados para ir ascendiendo cuerdas fijas, en especial esta parte del entrenamiento es súper necesaria en la Cascada de hielo de Khumbo, son unas torres gigantes, son filos y atravesar estos terrenos involucra un riesgo”, comentó Quintero.
Everest
En esta expedición estuvo expuesto a masivos peligros durante el ascenso a los cuatro campamentos que tuvo que recorrer para llegar al pico más alto del mundo. Entre el 8 y 14 de mayo se emprendió el ascenso final para llegar a la cumbre.
“Otro punto crucial donde me llevé el shock mental más grande de mi vida… cuando nos aproximamos a un rango de este tenor, la referencia que encontramos fue el fallecido el de las botas verdes y en ese momento me destruyó mi mente, porque iba tan enfocado aplicando las técnicas necesarias para mantenerme y sentirme seguro y al llegar a este punto te muestra otra perspectiva”, recordó el escalador, cuando le faltaba alrededor de 170 metros para culminar la travesía.
Añadió que “subiendo el paso me llevo el segundo shock con un cuerpo que está envuelto con la bandera de Canadá, nuevamente después de asumir la concentración, te desestabiliza, porque digo acá estoy como a 100 metros, como un pionero, estoy emocionado porque ya voy a plantar esa bandera pero te pone la perspectiva, pero este es el otro resultado que se ve ahí -la muerte-, y nuevamente requilibras tus sentimientos y emociones y volvemos a concentrarnos”.
Con lo anterior, profundizó en el tema del entrenamiento psicológico que fue de suma importancia para lograr este reto, y no desmayar o retirarse. “Hubo días exhaustos de cansancio excesivo y antes de entrar a cualquier zona oscura, me repetía: yo me entrené para esto”.
Avalancha de emociones
Al llegar a la cumbre del Monte Everest, los sentimientos y pensamientos es inexplicable resumir. “Vivís una avalancha de emociones, derramas un par de lágrimas, te decís que lo lograste y empiezas a revivir las emociones del sacrificio por años entrenando, los mensajes y oraciones que hicieron por mí, y solo digo; valió la pena y por eso entregué el mensaje satelital que había alcanzado la cumbre. Y a la misma vez recuerdas, esta es la mitad de camino porque hay que descender. Es una experiencia pico, hay que vivirla para entenderla, no la puedo describir”, explicó.
En esta expedición realizó doble récord, haciendo la denominada “travesía imposible”, que consiste en ascender el Everest, se baja a campamento cuatro e inmediatamente se emprende en buscar la cuarta cumbre más alta del mundo, Monte Lhotse, la cual realizó y obtuvo Quintero.
Subir hasta el pico más alto del mundo no es todo para Quintero, continuará próximamente con el desarrollo de una expedición a la Antártida para buscar las cumbres que le faltan por escalar. “Esto fue para ustedes y por ustedes, juntos lo logramos. Esta frase para mí es una filosofía; todo parece imposible hasta que se hace”, puntualizó.
Perfil
Santa Catarina, Camasca en Intibucá, que colinda con la zona fronteriza entre Honduras y El Salvador, vio nacer en 1982 a Ronald Quintero, quien enfrentó ver a su mamá partir en busca del sueño americano, y él continuó estudiando su carrera primaria en su pueblo, en una escuela por la que recorría alrededor de cinco kilómetros para poder llegar, y posteriormente, a sus 10 años se mudó a Tegucigalpa.
A los 16 años emprendió el mismo viaje de su mamá y logró ese reencuentro soñado al llegar a Berkeley, California. Ese es uno de sus primeros logros conquistados y posteriormente se vinieron los académicos y deportivos.
El cambio de un país a otro se reflejó hasta en su comida, actividades deportivas y costumbres, especializándose en la disciplina de atletismo e iniciando su motivación por el montañismo y escalada, donde el 16 de agosto de 2012, realizó su primera conquista en la cumbre de Whitney con una altura de 4,421 metros sobre el nivel del mar, una de las montañas más altas de los 48 estados de Estados Unidos.
Primeras conquistas
Posteriormente continuó con su travesía de escalar las siete cumbres más grandes del mundo. En el 2017, Quintero junto a su compañero Rigo Polio, conquistaron el pico más elevado de América y segundo del mundo, el cerro Aconcagua, ubicado en la cordillera principal de Los Andes, en Argentina. Sumado a ellos escalaron otras cumbres como:
- Monte Denali en Alaska
- Monte Kilimanjaro en Tanzania
- Y el Monte Elbrús en Kabardino-Balkaria en Russia.
Su trayectoria alpinista comenzó con la montaña Whitney, con una altura de 4,421 metros, la más elevada de los Estados Unidos y hasta el 12 de mayo de 2022 redobló su primera experiencia con el Everest a una altitud de 8,848 metros.
Opiniones
El vicerrector de Orientación y Asuntos Estudiantiles (VOAE), Ayax Irías, manifestó que, “es un ejemplo de perseverancia, actitud positiva, convicción profunda y es lo que la juventud universitaria requiere en este momento, ya que hemos pasado por grandes angustias, situaciones complejas a nivel social, político y ambiental, y a veces uno cree que las cosas no van a funcionar”.
“Nos sentimos gratamente satisfechos de tenerte en la universidad. Eres nuestro símbolo y nuestro héroe, por eso sugiero al equipo nuestro de escalada que, además de ser el equipo Puma, lleve el nombre de Ronald Quintero para que así se identifique siempre”, agregó Irías.
Por otra parte, Willian Calix, vicepresidente de la Federación Nacional del Deporte de Montaña y Escalada de Honduras (Fedna), expresó que, “para la Federación es un orgullo tenerlo acá en Honduras y saber que representó en alto el nombre del país.
«Hablar de Ronald Quintero es sinónimo de humildad, sacrificio, valentía, dedicación y disciplina. Como federación, la tomamos para dar lo mejor de cada uno de nosotros”, agregó.
Felicitaciones
Al evento asistió Fredy Moncada, fundador de la Asociación de Montañismo y Escalada en Honduras, quien recordó la creación y desarrollo de la asignatura en Montaña, el equipo y federación como tal.
Y para finalizar el evento, el rector de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Francisco Herrera, brindó su mensaje felicitando al alpinista. Asimismo, motivó a la comunidad universitaria.
“Todos los hondureños tienen la obligación de ver este mensaje. La motivación que brinda, la eliminación de las barreras, deja claro que todos tenemos ese potencial adentro de nosotros. Con ese amor que le tiene al país termina siendo un ejemplo a imitar por la juventud. Si sacamos lo mejor de nosotros, tendremos los mejores logros”, expresó Herrera Alvarado.
Fuente: Presencia Universitaria.
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