Dallas, jul (dpa) – La policía allanó una casa en un suburbio de la ciudad estadounidense de Dallas donde supuestamente vivía el autor del tiroteo que mató a cinco policías y dejó a otros siete heridos en esa ciudad de Texas, dijo la policía.
El autor fue identificado como Micah Xavier Johnson, de 25 años, un veterano militar negro sospechado de ser el francotirador que atacó el jueves por la noche a policías que custodiaban una protesta contra la violencia policial. Catorce personas recibieron disparos, incluidos dos civiles.
Johnson dijo a los negociadores que él era el único tirador, dijo la policía. Los investigadores ahora creen que actuó solo, tras recibir primeros informes de la policía y testigos que hablaban de un ataque coordinado por varios tiradores.
El alcalde de Dallas, Mike Rawlings, dijo que hubo una confusión sobre el número de tiradores ya que el autor de los disparos se movió durante el ataque.
El presidente estadounidense Barack Obama regresará un día antes de lo previsto de su gira Europea para viajar a Dallas a comienzos de la semana próxima, tras el ataque que dejó un saldo de cinco policías muertos y otros siete heridos, informó la Casa Blanca.
«El presidente continuará la tarea de reunir a la gente para apoyar a nuestros agentes de policía y a las comunidades, y encontrar un terreno común para resolver las persistentes disparidades raciales en nuestro sistema de justicia criminal», dijo el portavoz Josh Earnest.
El Ejército de Estados Unidos confirmó que Johnson sirvió como reservista hasta el año pasado, y que combatió en Afganistán desde noviembre de 2013 a julio de 2014.
En un comunicado de prensa, la policía confirmó que en un allanamiento realizado en su casa encontró «materiales para fabricar bombas, chalecos antibalas, rifles, munición y un diario personal de tácticas de combate».
La policía agregó que Micah Johnson utilizaba en Facebook otros alias como Fahed Hassen y Richard Griffin, también conocido como «Professor Griff».
Las autoridades informaron que Griffin parecía haber adoptado «una versión radical de afrocentrismo» y hasta había escrito un libro llamado «A Warriors Tapestry» (El tapiz de un guerrero).
Testigos oculares relataron el caos que se desató cuando poco antes de las 21:00 hora local cayeron las primeras balas. Las personas buscaron refugio en entradas de edificios y en paradas de autobús. Una testigo relató a la emisora KTVT que primero pensó que se trataba de fuegos artificiales. Dijo que oyó «al menos 30 disparos».
El atacante se atrincheró durante horas en el edificio de un estacionamiento, antes de ser abatido con ayuda de un robot. Durante las negociaciones con la policía, que se extendieron durante horas, dijo que quería matar a blancos, especialmente, a policías blancos, dijo el jefe de la Policía de Dallas, David Brown.
Además, señaló que había escondido bombas en diversos puntos de la ciudad. Las fuerzas de seguridad revisaron varias manzanas en el centro de la ciudad pero no hallaron nada.
Obama calificó el hecho de «despiadado, calculado y despreciable» y manifestó su total apoyo a las autoridades. Los postulantes a la presidencia de Estados Unidos Hillary Clinton y Donald Trump así como muchas celebridades se mostraron consternados por estos hechos.
La secretaria de Justicia, Loretta Lynch, llamó a la cohesión. Fue una semana de profundo dolor y terribles pérdidas, dijo en una conferencia de prensa este viernes. «La violencia nunca es la respuesta», señaló Lynch en referencia a la muerte de los dos afroamericanos a manos de la policía. Los estadounidenses deben recordar que tienen un corazón y un alma comunes. «Unámonos, no nos distanciemos».
«Fue una noche devastadora», dijo un policía a través de la red social Twitter. CNN habló del día más letal para la policía en Estados Unidos desde los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001. En aquel entonces, perdieron la vida 72 policías.
Uno de los policías asesinados estaba al servicio de la empresa municipal de transporte de Dallas DART. Según citaron los medios a un portavoz, se trata del primer agente al servicio del DART asesinado en cumplimiento de su labor desde 1989. Otros tres efectivos del DART resultaron heridos, informó la entidad en Twitter.
Una participante en la protesta resultó herida en una pierna. La mujer acudió a la marcha con sus hijos, dijo su hermana a la prensa. Se lanzó sobre su hijo de 15 años para protegerlo de las balas.
En Dallas, al igual que en Nueva York y otras ciudades estadounidenses, se había desarrollado una manifestación pacífica contra la violencia policial a causa de la muerte de dos negros a manos de la policía en el transcurso de dos días.
El martes, en Baton Rouge (Louisiana), dos policías obligaron a Alton Sterling, de 37 años, a tumbarse en el suelo y le dispararon de cerca. El miércoles, Philando Castile, de 32 años, murió en un hospital de Falcon Heights (Minnesota) luego de que la policía le disparara en un control de tránsito.
El gobernador de Minnesota admitió problemas de racismo. «¿Habría pasado esto si los ocupantes (del vehículo) hubieran sido blancos? Creo que no», dijo Mark Dayton. «Creo que todos nosotros en Minnesota debemos admitir que existe esta forma de racismo».
