SAN PEDRO SULA.- Un grupo de vendedores ambulantes en San Pedro Sula han puesto a la palestra un viejo problema de la ciudad. También han hecho graves denuncias que las autoridades deberían de investigar,
Todo comenzó la mañana del martes cuando vendedoras ambulantes denunciaron que fueron objeto del robo de su mercadería, Igualmente del desalojo de sus puestos a media noche del lunes anterior.
Una de las afectadas reportó la pérdida mayor a 70 mil lempiras, mientras otras hacían serías denuncias. Especialmente contra las autoridades de Mercados y Abastos de la alcaldía de San Pedro Sula.
Una vendedora denunció a la TV que los puestos desarticulados eran cinco y que la Policía Municipal se detuvo porque los propietarios de los otros llegaron a tiempo y lo impidieron.
La vendedoras acusaron a los propietarios de los almacenes de haberlos denunciados. También dijo que la mayoría eran chapines.
«Uno lo que vende en las calles no es lo que ellos venden, uno vende ropa y frutas y otras cosas y ellos achinería, justificó una de las vendedoras.
«Yo era vendedora de la tercera Avenida y de allí nos desalojaron bajo el argumento de que nos iban a ordenar hasta que hubiera un mercado. Aja, vaya a ver la Tercera Avenida donde ahora hay más de 100 carpas. Y por qué hay carpas allá, porque a la semana le pasan pisto a ese delegado sinvergüenza», siguió relatando la vendedora.
Luego lanzó otra grave acusación contra ese delgado municipal que no identificó pero que todos en el sector de Abastos y Mercados lo saben:
«El vino y dijo que quería cinco empleadas y se le dio las cinco empleadas y solo vino de madrugon a votar y arruinar mi negocio, agregó la exaltada vendedora.
Hace varios meses que los vendedores ambulantes del Centro de la Ciudad sufren la persecución de los policías municipales. Esto en su desordenado intento por poner orden en el centro de la ciudad.
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Vendedores ambulantes en SPS claman justicia
Los vendedores ambulantes desde hace tiempo vienen denunciando que las personas que se dedican a este rubro, si pagan directamente a los agentes de la municipalidad no los desalojan.
El grupo de afectados clama por justicia y piden que alguien se apiade de su situación. Expresan que se han hecho presentes a las oficinas de la fiscalía, de derechos humanos y la municipalidad. Sin embargo, nadie les ha prestado atención.
El desalojo de los vendedores es un problema antiguo. Pese a ello ninguna autoridad ha intentado en solucionar el conflicto creando los espacios para que puedan hacer sus ventas. Algunos denuncian directamente que es la única forma que tienen para alimentar a sus familias.
En sus protestas, los vendedores denunciaron que elementos de la policía fueron llamados por la esposa de uno de los oficiales que tiene un negocio en el lugar.
Aparentemente las autoridades denunciaron la quiebra de vidrios y amenazas hacia el resto de establecimientos que existen en el lugar.
Muchas de las personas que lo perdieron todo, son madres solteras que esperaban hacer sus ventas para tener algo que comer en Navidad.
«Nos dicen que estorbamos, pero vaya a ver la tercera avenida, llena de vendedores», dijo María, una de las afectadas.
