RENGLÓN
Entre los delirios del rebombo, corre en los pasillos del Hemiciclo el cuento de que en sus gastos invisibles hay un renglón dorado reservado para el helicóptero que ahora funge de alfombra voladora y que anoche aterrizó directo desde el edén insular solo para coronar una micro sesión que duró menos que un suspiro.
AMÉN
Pues la función arrancó a las 7:40, con todo el dramatismo de una escena de acción: una valla humana custodiando a la Junta Directiva, como si el rebombo esperara una emboscada. Pero el pico de suspenso fue puro humo, porque bastó el amén de la oración para que a las 7:48 todo acabara.
RITUAL
Más fue la espera que la sustancia: citaron a los padres de la patria desde las 5 de la tarde, y cuando arrancaron, solo leyeron un papelito avisando que el presupuesto para la carrera proselitista ya entró por correspondencia y será enviado a dictamen. Tremendo ritual, solo para oficializar lo que ya sabían hasta los ujieres.
ACTA
Cuenta la oposición que el barbón fue mandado como apagafuegos parlamentario, no para calmar ánimos, sino para evitar que se activara la votación para ratificar el acta de endeudamientos con el CAF. Pero, como el numerito no les salió, los padres de la patria se quedaron parqueados en sus curules bajo la consigna del “aquí no se vota”. Y para forzarles un desalojo, les cortaron el aire acondicionado, los televisores y casi que hasta la luz de emergencia, como diciéndoles con sutileza tropical: “váyanse, que el show de hoy se acabó”.
MANDO
Muerto el rey, viva la reina… Tras la renuncia de la subcomandanta en las gloriosas, y sin más soldados de confianza que su reflejo en el espejo, la manda más se calzó las botas y asumió el control, rodeada de mandos intermedios que hasta el momento no se identifican pero listos para acatar.
TIMÓN
Con un rosario de delitos a cuestas, fue a caer en Dominicana el pseudo detective del indómito, ese mismo que aquí en laDeds Hibueras posaba de salvador mediático para dar extensas entrevistas en programas y, de a poco, arrebatarles hasta el timón, con difamación en una mano y manipulación en la otra. Pero allá, en su tierra natal, lo pararon en seco y acabó enchachado.
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