FICCIÓN
Entre tanto circo, sería bueno que el Rebombo explicara por qué, justamente desde que arrancó la semana, hizo las de “a lo Diego” y tranquilito, allá en Marruecos, actuó como espectador del metraje de ficción que se desató ayer en el Hemiciclo.
BAMBALINAS
Qué milimétricamente coordinado se puso en escena el espectáculo en el Palacio Legislativo, y tras bambalinas se gestó con doble intención: por un lado, para bajarle el gas a lo del algodón, y por otro, para infundir pánico y comenzar a torcer brazos.
LLAVE
Desde los chismes de pasillo, los cronistas parlamentarios cuentan que supuestamente al asesor se lo llevó la ATIC porque cerró con candado la oficina del Rebombo y hasta escondió la llave.
MONTAJE
Aunque rapidito lo soltaron, más bien, en horas de la noche, lo recibieron con gran algarabía, gritos y aplausos. Luego, en conferencia de prensa, justificaron su clara intención de ocultar algo en medio de un montaje para el que, según ellos, “no estaba preparado”.
GOLES
Lo que sí está claro con ese teatrazo, en el que el “Fiscal de Oro” se pintó como el héroe de la película, es que metieron como tres goles en una sola jugada. Y en cuestión de segundos, apagaron el “revolú” del algodón.
MINÚSCULOS
Aunque desde el extranjero y por video doña “Lencha Algodón” no dejó títere con cabeza al llamar “malnacidos” tanto a sus opositores como a la prensa, que cuestiona sus “minúsculos” desastres.
DIRECTAS
Mientras tanto, los más desconfiados ya empiezan a sospechar que no se trata verdaderamente de un desabastecimiento. Las dudas apuntan a que, a raíz de esta “escasez”, terminen justificando más compras directas.
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