Tegucigalpa. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el retiro de los fondos destinados a Gavi, una organización internacional que promueve la vacunación infantil en los países en vía de desarrollo. ¿Honduras se verá afectado por esta nueva disposición?
Y es que el gobierno estadounidense retirará unos 1,200 millones de dólares a la organización Gavi. Según las autoridades de la organización, ese apoyo es vital para continuar dando el apoyo a los niños de diferentes países.
«Una reducción de la financiación de Gavi por parte de Estados Unidos tendría un impacto desastroso en la seguridad sanitaria mundial, pudiendo provocar más de un millón de muertes por enfermedades prevenibles y poniendo en peligro vidas en todo el mundo a causa de graves epidemias», declaró la directora general de esta organización internacional, Sania Nishtar, en un mensaje enviado a AFP.
Gavi fue una de la organización que realizó distintas donaciones a Honduras durante la pandemia por el Covid-19.
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Honduras paga sus vacunas
A criterio de la ministra de la Secretaría de Salud (Sesal), Carla Paredes, la medida del gobierno estadounidense no tendrá repercusión alguna en Honduras, pues la Sesal compra las vacunas que se usan en la población hondureña.
“Realmente no nos afecta, las 25 vacunas que se tienen se pagan automáticamente, no tenemos subvenciones, nada. Gavi nos apoya con las del VPH, el resto las paga el país al 100 %. Supongo que los países donde aún son subvencionadas probablemente tengan alguna dificultad, Honduras no la tiene”, afirmó.
Agregó que la Sesal ya tiene contempladas esas inversiones en el presupuesto para el 2025. «Hubo un tiempo en que sí (se recibían donaciones de Gavi), pero Honduras lo superó hace muchos años”.
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Cobertura de inmunización
Por su parte, el médico y diputado Carlos Umaña expresó que Honduras ha sido beneficiada con Gavi y que podría enfrentar problemas en la cobertura de inmunización.
“Por supuesto que nos debe preocupar. Nuestro país ha recibido la mayoría de las vacunas a través de donaciones de la Alianza para las Vacunas y del Club Rotario, que ha impulsado programas contra la polio a nivel internacional. Sin estos fondos, Honduras necesitará muchos recursos para adquirir las vacunas del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI)”, manifestó.
En ese sentido, recomendó a las autoridades tomar previsiones y gestionar ayuda diplomática para evitar que el recorte afecte a la población infantil.
“Es crucial que los presidentes de los países afectados soliciten a Estados Unidos que no suspenda estas ayudas, pues el impacto será severo. Los países desarrollados pueden costear estas vacunas, pero en los países en vías de desarrollo no será posible”, apuntó.
Manejar provisiones de vacunas
Sobre el tema, el director de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) Carlos Hernández, recomendó a las autoridades gubernamentales priorizar recursos para evitar que se vea alterada la provisión de vacunas.
“Aunque aquí no se ha querido reconocer de manera oficial la cooperación norteamericana, que para el ejercicio 2025 era de casi 200 millones de dólares, mucho de esos fondos eran utilizados para apoyar de manera directa la acción que el Estado realiza en educación, justicia y particularmente en salud, en el tema de vacunas. Lamentamos eso, esperamos que el gobierno de la República pueda priorizar los recursos para que no se vea alterada la provisión de vacunas para el sistema sanitario”, indicó.
Hernández apuntó que Honduras ha registrado una disminución en la cobertura de inmunización de menores de edad.
“El nivel de inmunización en los niños y niñas de Honduras, es menor al que hemos tenido. Honduras recibió premios internacionales por tener la tasa más alta, pero en los últimos años ha venido cayendo.
Umaña finalizó recalcando que la decisión de Estados Unidos es soberana, por lo que debe respetarse. Sin embargo concluyó que el Gobierno hondureño debe buscar la manera de priorizar los recursos.
