Tegucigalpa, Honduras. El lirio acuático, por su sobrepoblación, han empezado a afectar la represa Los Laureles en la capital del país, pero las autoridades ya emprendieron labor de limpieza y ya se retiró casi la mitad de la planta.
Esta especie ha sido arrastrada desde el río Guacerique hasta este embalse. La planta comienza a proliferarse durante la temporada seca. En ese sentido, empleados de limpieza de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC) han realizado operativos.
De igual manera, han colaborado empleados del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA). El trabajo de mantenimiento consiste en la sustracción de la maleza para evitar que se introduzca en las plantas potabilizadoras del embalse.
Labor de limpieza
Se retiró más del 40 por ciento de la planta invasora en la represa. Además, se pretende que en las próximas semanas se pueda remover la totalidad del lirio.
El gerente de la División Metropolitana del SANAA, Carlos Hernández, explicó que la gran cantidad de lirios que se localizaba en el embalse ya representaba un problema para el funcionamiento de la represa.
“Nos está afectando y nos podría afectar más por lo que queda del verano si no llegara a retirarse”, estimó. Y es que el ejemplar logró cubrir un estimado de 20 hectáreas de la represa.
Si no se logra retirar el lirio, se considera que puede llegar a perderse medio millón de metros cúbicos del vital líquido. Esta pérdida de agua puede generarse en la temporada seca. Es decir, un promedio de tres meses desde que inicie el verano en Honduras.
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Proliferación
A pesar de que las autoridades del SANAA comenzaron hace algunas semanas con el trabajo de limpieza, la especie se ha proliferado. A tal grado que se requiere del apoyo de los técnicos del Comisión Permanente de Contingencias (COPECO) y de los Bomberos.
