Redacción. Agentes de la policía de Eagle Pass, Texas, rescataron en las últimas horas a un menor hondureño de cinco años de edad que, junto a un grupo de 49 inmigrantes ilegales, cruzó el río Bravo sin familiares que lo acompañaran.
De acuerdo con la información, el pequeño llevaba consigo una nota con su nombre escrito, número de teléfono y una dirección (St. Louis, Misuri).
El vocero del departamento de Seguridad pública de Texas en la región sur, Chris Olivares, confirmó que el hondureño fue puesto a salvo para brindarle la atención médica necesaria. En tanto, realizarán las labores pertinentes para poder reunirlo con sus familiares en los Estados Unidos.
El hecho deja en evidencia la confianza que padres de familia depositan en coyotes o «polleros», con la esperanza de que sus familiares logren cruzar irregularmente a Estados Unidos a través de la frontera.
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No es el primer rescate
El caso de este menor, no es el primero en 2024, pues el pasado jueves 15 de febrero oficiales fronterizos rescataron a dos niños hondureños, en la orilla del río Bravo, al norte de Eagle Pass, Texas.
Los menores correspondían a una niña y un niño de entre 8 y 10 años de edad, que resultaron abandonados a 10 millas al norte del Shelby Park.
El niño hondureño llevaba consigo una nota con el nombre de su madre, su número de teléfono y la dirección donde supuestamente reside.
En la hoja de papel blanco que portaba el infante se podía leer: «Mamá: Verónica Magdalena Díaz Gómez. Los Ángeles, California. Código postal 90003».
Por otro lado, la niña tenía consigo un certificado de acta de nacimiento, aunque no se logra distinguir su nombre.
Las autoridades de Seguridad de Texas no proporcionaron detalles exactos sobre la edad de los niños hondureños. Tampoco sobre si son hermanos o si tienen algún otro vínculo familiar.