Redacción. El director ejecutivo e integrante de la Red por la Equidad Democrática en Honduras (REDH), Yovanny Argueta, dijo que la solicitud del Tribunal de Justicia Electoral (TJE) en pedir un presupuesto extraordinario de 60 millones de lempiras para usarlos en los procesos electorales de 2025 es algo que puede tener «tintes positivos y negativos».
En una charla con Diario Tiempo, Argueta señaló que la solicitud refleja, en parte, un interés del TJE en garantizar la transparencia y eficacia del proceso electoral, algo esencial y clave para fortalecer la democracia en el país.
También mencionó que el TJE tiene mayores responsabilidades, de manera que es «lógico que requiera más recursos para cumplirlas» adecuadamente. Destacó que solicitar fondos con anticipación es un acto de planificación que permite a las instituciones prever y evitar problemas de última hora.
Aspectos negativos
El director de REDH de igual manera advirtió al TJE que los recursos del Estado son «limitados» y hay necesidades sociales urgentes (salud, educación, infraestructura), por lo que es importante justificar detalladamente cómo se utilizarán los fondos y evitar el despilfarro.
Expuso que la percepción de corrupción en Honduras puede generar dudas sobre si esos recursos se manejarán de forma transparente y efectiva. «Si el presupuesto general para 2025 no contempla recursos suficientes para las instituciones electorales, la asignación puede percibirse como improvisada o desordenada», apuntó Argueta.
«Es correcto que el TJE solicite un presupuesto adecuado para cumplir con su mandato. Sin embargo, es crucial que la solicitud sea transparente, que se detallen los rubros específicos dónde se utilizarán los fondos y que exista una rendición de cuentas estricta. O de lo contrario, aumentaría la desconfianza ciudadana. Incluso alimentaría críticas sobre el manejo de los recursos públicos en un país donde las prioridades básicas aún son un desafío», concluyó.