TEGUCIGALPA-HONDURAS. El rector interino de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Francisco Herrera, pidió a los cuerpos de seguridad del Estado investigar la adquisición de bombas lacrimógenas por parte de estudiantes encapuchados.
Herrera manifestó que la toma que realizan supuestos estudiantes es una situación que afecta. Además, agregó esto indigna a la población universitaria que quiere clases.
Asimismo, indicó que las tomas también perturba a las personas que transitan por el bulevar Suyapa. Esto, debido a las tomas de la calle por parte de este grupo de estudiantes.
En ese sentido, pidió que se realice una investigación sobre la adquisición de bombas lacrimógenas por parte los encapuchados.
De acuerdo a Herrera, le llama mucho la atención que los encapuchados que ingresaron a tomarse los edificios con la finalidad de que los demás estudiantes los acompañaran en la movilización que terminó en enfrentamiento, hayan lanzado bombas lacrimógenas.
Al respecto, reveló que uno de los encapuchados lanzó una bomba lacrimógena en uno de los edificios. La finalidad era que los demás estudiantes salieran a protestar.
Visto lo anterior, Herrera dijo que es una situación que les preocupa porque ya se hizo de conocimiento de las autoridades. Pero que hasta el momento no se tienen detalles de cómo adquieren dichos artefactos.
“Se tiene que hacer una investigación exhaustiva para verificar de dónde proceden los artefactos. Se tuvieron que adquirir en algún sitio y proporcionados a estos jóvenes”, puntualizó.
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Herrera lamenta que universidades públicas realicen acciones de violencia
De igual forma, explicó que son grupos minoritarios los que realizan las tomas periódicas en horas del mediodía o tarde en el bulevar Suyapa. Mismas, a las que también se incorporan personas externas a la UNAH, estableció Herrera.
A efecto de eso, el rector lamentó que sean las universidades públicas las que realicen este tipo de acciones. Lo anterior, debido a que estudiantes de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) también realizan protestas que terminan con enfrentamientos.
Herrera argumentó que de esa conflictividad social lo que preocupa son los enfrentamientos que protagonizan estudiantes y policías.
“La suspensión de clases no ha sido un factor extremo. Solamente es cuando realizan marchas que buscan la forma de que los demás estudiantes los acompañen”, detalló.
Para finalizar, dijo que no ven que se vayan a lograr avances en esa conflictividad en un breve plazo.
“Esto obedece a factores externos de la universidad. Al interior de la misma se han sostenido reuniones con los estudiantes. Es una minoría la que está siendo acuerpada por grupos externos. Ellos son los que no quieren dialogar”, concluyó.
