DANLÍ.- El técnico del Real de Minas, Raúl Cáceres agradeció a Dios a la afición y a su familia tras retener la permanencia de la Liga Nacional la tarde de ayer en el último parido de la triangular.
El equipo “minero” se impuso 4-2 ante el Juticalpa dirigido por Wilmer Cruz, con ese resultado los “canecheros” bajaron a la segunda división de Honduras.
Tras acabar el juego el técnico salió muy contento del resultado y de haber logrado salvar la categoría y buscar un mejor lugar en el próximo torneo.
«Salvar la categoría era el primer objetivo y lo cumplimos, lo dije desde hace días que Real de Minas no se iba, ya le pedí permiso a mi esposa para celebrar hasta tarde», inició diciendo muy contento.
Asimismo el estratega dedicó este logro a su familia y a una persona muy especial que ya no se encuentra con él.
«Hay un Dios en cielo y un pueblo rezando por este equipo, hoy hemos dado fe que las oraciones que hicimos llegaron desde las alturas, este triunfo va para mi madre que está en el cielo, mi familia y a mi abuela», aseguró.
Sobre la gran hazaña del Real de Minas
«Lo único que puedo decir es que Raúl no hizo nada, Dios nos ayudó solo tomé decisiones, jamás dude que este barco se hundiría. Siempre confié que el objetivo se cumpliría, se llegó a estas circunstancias, el fútbol hizo justicia y premió al equipo que sin ningún peso mantuvo la categoría», cerró el técnico.
