TEGUCIGALPA. En foro televisivo esta mañana, el exdirector de la Policía Nacional, Ramón Sabillón Pineda enfatizó que se vio obligado a salir de Honduras por su propia seguridad y la de su familia, ya que según él, pretendían implantar evidencias que lo inculpan en el caso por el que fue señalado y suspendido de su cargo.
«Es una situación que está relativa a mi vida, a la protección de mi vida y la de mi familia, también a la supuesta implantación de evidencias y otras diligencias que estoy haciendo», declaró seguidamente Ramón Sabillón.
Anteriormente, Ramón Sabillón reveló que un narcotraficante hondureño ya extraditado le cuestionó, luego de su captura, por qué no perseguían a miembros del Partido Nacional coludidos con el tráfico de drogas. «Y me dice él (el narco), me increpa, con el respeto que me tuvo: ¿Y por qué no hacen nada con el otro cartel del Partido Nacional’, o cartel cachureco como le dicen», relató Sabillón sobre detalles de una entrevista que sostuvo con este capo, de quien no mencionó nombre.
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El exjefe policial brindó declaracionesw exclusivas a Globo TV, días después que The New York Times publicara un informe de investigación que involucra a la cúpula policial del 2009 en la muerte del zar antidrogas Julián Arístides González. El reportaje dice que Sabillón encubrió a los culpables.
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Luego el exjefe policial acudió al Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh) para interponer una denuncia por amenazas a muerte contra su persona. De paso, negó las acusaciones en torno al caso y señaló que NYT publicó documentos falsos.
“He recibido amenazas de muerte vinculados al actual gobierno, el jefe de sicarios se comunicó conmigo para amenazarme y me dijo que estaban buscando a la gente para matarme” señaló Sabillón.
MOLESTIAS DE SABILLÓN CON EL ESTADO
El ex altojerarca policial argumentó en agosto de 2015 estar totalmente solo. Le dejaron menos de 6 policías para que lo cuiden, y tres de esos con vacaciones. Ante eso, manifestó que es como tirar al matadero a esos pocos policías.
«Si usted evalúa la amenaza, quien me va a atacar a mí no va ser uno, no van a ser dos, van a ser de diez a quince personas», dijo el comisionado general.
La Secretaría de Seguridad negó en un comunicado que se le haya quitado la seguridad. Afirmaron que lo que se hizo fue una revisión de los agentes teniendo que reducir de 50 a 25.
Sabillón expresó en ese momento que él nunca había tenido 50 elementos asignados para que lo cuidaran, ni siquera 25. «El Estado me deja totalmente expuesto, como dicen ahí, me está entregando», apuntó el policía.
El comisionado explicó que en la práctica solo tuvo a 6 agentes que lo cuidaron. Explicó que en teoría le asignaron a 19 agentes, pero estos hacían turnos reduciéndose a 9, y de esos, algunos se excusaban quedándose totalmente desprotegido.
Sabillón añadió que el retiro de su seguridad por parte del gobierno era una acción perversa, mal intencionada y que evidenciaba que el Estado lo estaba entregando al crimen para que lo asesinasen.
