Redacción. En los últimos días, varios ciudadanos denunciaron la venta descontrolada de medicamentos sin certificación, los cuales están siendo comercializados por casas farmacéuticas no autorizadas; además, de la venta sin regulación de fármacos vencidos en mercados y calles de la ciudad capital y de San Pedro Sula.
Esta situación genera alarma en la población debido al poco control que mantienen las autoridades sanitarias en esas zonas comerciales y los riesgos a la salud pública que este fenómeno implica.
Sin embargo, expertos en salud señalan que si bien es cierto, el consumo de este tipo de medicamentos no genera daños graves a la salud de las personas, sugieren evitar la compra e ingesta de los mismos, porque son más un gasto de dinero, ya que no dan los resultados esperados.
En Honduras, la Agencia de Regulación Sanitaria (ARSA) es el ente encargado de regular, supervisar, revisar, verificar, controlar, vigilar y fiscalizar el cumplimiento del marco normativo de los productos, servicios y establecimientos de interés sanitario. No obstante, expertos consideran que el ARSA «no regula realmente la venta de medicamentos en Honduras».
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Medicamentos vencidos
El doctor Carlos Umaña, indicó que el único riesgo de consumir este tipo de medicamentos es que el fármaco no cumple su función. Es decir, que no proporciona la efectividad para tratar alguna enfermedad en específico.
«Por lo general los medicamentos tienen una fecha de vencimiento que está relacionada con la potencia del mismo o con los componentes de manufactura que tienen. Entonces, las casas farmacéuticas en un margen de seguridad y pensando en los componentes ponen una fecha de vencimiento para garantizar totalmente la potencia y eficacia del medicamento«, explicó el galeno.
Asimismo, Umaña dijo que un medicamento puede funcionar dos o tres meses después de su fecha de caducidad.
Compra de fármacos
Sin embargo, el también diputado, señaló que las personas no deben comprar este tipo de medicina vencida porque incluso desconocen si su empaque se encuentra aún en buen estado y estarían poniendo en riesgo su salud.
«Si usted va a comprar a un lugar donde lo están vendiendo (medicamentos) a precio de gallo muerto, tiene que tener mucha precaución. Esto porque no solamente se trata de la potencia del producto sino que del empaque que puede tener microfracturas y un montón de cosas», expuso.
Por ello recomendó «no comprar este tipo de productos aunque le ofrezcan precios muy bajos, porque usted estaría arriesgando su vida más que su dinero». «Más si se trata de enfermedades como hipertensión, diabetes u otras que pueden ser afectadas si uno no ingiere las cantidades adecuadas de producto», detalló.
Efectividad de los medicamentos
Mientras tanto, el doctor Samuel Santos, vicepresidente del Colegio Médico de Honduras, concordó con lo expuesto por Carlos Umaña, que estos medicamentos no provocan ningún riesgo grave en la salud de las personas, sino que únicamente reducen su efectividad.
«Va a ocurrir algo catastrófico, un envenenamiento, ese temor que le da a las personas pues no, eso no se mira en la estadística médica. Pero, lo que sí podemos ver nosotros es que sí se disminuye la capacidad de estos para poder contrarrestar la enfermedad«, declaró el médico.
A su vez, resaltó que «en Honduras cualquiera de nosotros puede ir a una farmacia y comprar un antibiótico y utilizarlo para una enfermedad viral. Esa ingesta sí hace daño porque esta generando resistencia a los medicamentos y a los antibióticos». Situación que existe «por la venta libre de medicamentos» que impera en el país, añadió.
Regulación en la venta de medicamentos
Por su parte, el químico farmacéutico Juan Carlos Hernández, señala que muchos de los medicamentos que se venden sobre todo en las calles son incluso falsificaciones y que el problema se origina porque ninguna institución hace una vigilancia efectiva del tema.
“La Agencia de Regulación Sanitaria (ARSA) le echa la culpa a la municipalidad, la municipalidad le echa la culpa a ARSA y así en las distintas ciudades”, enfatizó.
Del mismo modo, denunció que en varias oportunidades las autoridades han hecho operativos en laboratorios clandestinos y han comprobado que se fabrica producto de muy mala calidad, mismo que incluso logran vender al estado o que prolifera en los mercados.
Finalmente Rodríguez pidió una vigilancia efectiva para garantizar la eficiencia de los fármacos. Y la seguridad de la población, a fin de que la situación no siga en un descontrol total.
Acciones del ARSA
Desde el ARSA aseguran que si bien es cierto es una realidad que en años anteriores no ha existido una regulación efectiva, en relación a este y otros temas, en la administración actual buscan trabajar en materia de calidad y eficiencia de medicamentos.
Según, la Comisionada presidenta del ARSA, Dorian Salinas ya iniciaron reuniones con la Secretaría de Salud para determinar las líneas de colaboración, porque para ellos no es negociable poner en riesgo la calidad de medicamentos.
“Nuestra finalidad como institución es poder garantizar la calidad de los medicamentos. Sabemos que en el pasado los actos de corrupción han estado girando en cuanto a la calidad de medicamentos y dispositivos médicos”, sentenció.
Los expertos consultados por Diario Tiempo coinciden en que la regulación en la comercialización de medicamentos es débil. Sobre todo, en las principales ciudades del país. Por lo que hacen un enérgico llamado a las autoridades pertinentes. Para velar por la salud de la población y atender la venta descontrolada de fármacos.
