HONDURAS. En la última década, el Presupuesto General de Ingresos y Egresos de Honduras ha experimentado un crecimiento sostenido, aumentando en más de 285 mil millones de lempiras, con una tasa anual promedio del 8.4% según un análisis realizado por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
De acuerdo con la UNAH, desde 2010, el presupuesto general ha mostrado un aumento progresivo. Durante ese año, se registraron 121,990.20 millones de lempiras.
A lo largo de los años, se han registrado incrementos importantes: para 2013 alcanzó los 165,502.20 millones y en 2023 subió hasta los 392,519.70 millones de lempiras. Para el año 2024, se aprobó un presupuesto de 407,137.50 millones, y se proyecta que en 2025 el monto suba a 430,907.82 millones de lempiras, conforme al anteproyecto presentado por la Secretaría de Finanzas (SEFIN) ante el Congreso Nacional.
Además, la UNAH destacó que el gasto en los últimos años ha priorizado el servicio de la deuda pública, la masa salarial y la seguridad.
Un 24.59% del presupuesto se ha destinado a sueldos y salarios, mientras que el servicio de deuda ocupa un 17.1%. Este enfoque, aunque necesario, deja en segundo plano otras áreas cruciales para el desarrollo.
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Asignación insuficiente a la UNAH
Un punto de controversia que señala la UNAH es la falta de cumplimiento en la transferencia constitucional del 6% del presupuesto de la República a la institución.
Entre 2017 y 2024, la UNAH solo ha recibido un aumento promedio del 3.64%, lo que pone en riesgo su capacidad para mejorar la infraestructura y mantener la calidad educativa.
Asimismo, para 2025, se proyecta un incremento de apenas 1.39%, lo que podría poner en riesgo la calidad educativa de la máxima casa de estudios.
Recomendaciones
Ante este panorama, la UNAH propone una serie de recomendaciones para mejorar la ejecución presupuestaria y garantizar que los recursos públicos se utilicen de manera eficiente. Entre las medidas sugeridas destacan:
- Asegurar que la asignación de recursos responda a las verdaderas necesidades del país, priorizando sectores clave para el desarrollo.
- Implementar reglas fiscales que limiten el crecimiento del gasto público a tasas sostenibles.
- Focalizar las transferencias sociales y programas de compensación hacia los sectores más vulnerables.
- Mantener un seguimiento constante de los niveles de ejecución presupuestaria en relación con el gasto programado, y establecer procesos de control más estrictos.
- Revisar la estructura de la masa salarial del sector público, garantizando que los recursos asignados a este rubro no sobrecarguen el presupuesto.