Redacción. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, utilizó datos de un analista de la Fundación Heritage para afirmar que la administración del demócrata Joe Biden manipuló deliberadamente las cifras oficiales de empleo.
En una conferencia de prensa en la Casa Blanca, el analista económico Stephen Moore, de la fundación de ultraderecha, sostuvo que el gobierno de Biden sobreestimó en 1.5 millones la cantidad de empleos creados en sus dos últimos años de mandato.
Moore también respaldó la decisión de Trump de despedir a Erika McEntarfer de la Oficina de Estadísticas Laborales.
«Lo hicieron a propósito», aseguró Trump, mostrando gráficos presentados por Moore. Sin embargo, no proporcionó otros datos oficiales para respaldar sus acusaciones contra su predecesor.

Lea también – Atención: EE. UU. endurece reglas para visas de trabajo a partir de este mes
Anualmente, la Oficina de Estadísticas Laborales revisa las estimaciones mensuales de empleo usando registros de impuestos de empresas. La Fundación Heritage y otros grupos conservadores están usando estas revisiones para acusar a Biden de anunciar una creación de empleos superior a la real.
Según el análisis de Moore, esta sobreestimación de empleos habría afectado la asignación de presupuestos estatales y programas de subsidios.
Antes de la conferencia, Trump la había promocionado como un evento en el que haría anuncios económicos importantes.
Trump despide a economista
El presidente Donald Trump destituyó a Erika McEntarfer, comisionada de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), tras acusarla de manipular las cifras de desempleo más recientes. Trump afirmó que McEntarfer falsificó datos para beneficiar a la candidata demócrata Kamala Harris en las elecciones de 2024. De esas acusaciones Trump no presentó pruebas que respaldaran estas acusaciones.
El mandatario expresó en una publicación que las cifras de empleo de ese día parecían manipuladas para hacerlo quedar mal a él y a los republicanos. También comparó la situación con un episodio en noviembre de 2024, cuando la BLS revisó a la baja los datos de empleo, eliminando más de 818,000 puestos que se habían reportado antes de las elecciones. Trump calificó esto como una «estafa total».
