REDACCIÓN.- Ante la violación de derechos humanos denunciada en Nicaragua, la postura de buena parte de la prensa nicaragüense se basa en desvalorizar, minimizar y mofarse de la lucha de las familias de la oposición.
Actualmente hay alrededor de 27 presos políticos desde hace más de un año, estos se encuentran en el centro penal El Chipote.
Un análisis de las publicaciones de los medios de comunicación del vecino país, indican que la prensa, en buena medida, también está en contra de la oposición. Y mediáticamente, además de la lucha de los líderes oposición, los medios también desvalorizan a sus familiares.
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Recientemente, 23 familiares han solicitado que se les otorgue a los presos políticos la libertad a través de la amnistía. En Nicaragua esta solicitud no tuvo mucha repercusión debido a que la prensa no resaltó estos esfuerzos.
Asimismo, los parientes señalaron que los detenidos estaban siendo víctimas de hambre, incomunicación y enfermedades; la sorpresa para los nicaragüenses fue la poca atención a la denuncia.
Un caso reciente es el de un joven con capacidades especiales que las autoridades no le permitían ver a su padre. Para este encuentro tuvo que pasar más de un año.
Además, para lograr su objetivo una de las partes involucradas realizó una huelga de hambre que duró 59 días.
Este hecho tuvo mucha relevancia en Nicaragua, sin embargo, algunos medios de comunicación lo ignoraron y no le dieron importancia. Esto significa que están siendo parte de la violación a los derechos y represión hacia el pueblo nicaragüense, de acuerdo con analistas.
Además, han denunciado que están siendo víctimas de la privación de derechos, pues no ven a sus familiares que se encuentran guardando prisión.
Algunos medios de comunicación han tratado estos esfuerzos de manera que desagrade al pueblo nicaragüense.
No cuestionan ataques a la iglesia
Los constantes ataques a la Iglesia Católica de Nicaragua tienen repercusión a nivel internacional, pero en la localidad no han sido cuestionados. El análisis de los medios refleja que estos incidentes son invisibles.
Hasta el momento, hay incluso sacerdotes detenidos y no permiten que las personas sean parte de la celebración de la misa. Han llegado al extremo de poner barricadas en las puertas de los templos religiosos. Fuentes consultadas indican que estas informaciones no están en los medios.
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Estas acciones de privación a los feligreses no han sido cuestionados por parte de un sector de la prensa, señalaron.
Esa invisibilización sucede pese a que las autoridades internacionales de la Iglesia se han pronunciado al respecto pidiendo que se libere a los sacerdotes apresados y que la situación termine, uno de ellos el Papa Francisco.
¿Qué está haciendo la SIP?
Ante esta situación, hay sectores que cuestionan el papel de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP). Estiman que ha guardado un rotundo silencio sobre distintas situaciones de un sector de la prensa en Nicaragua.
La prensa está jugando un papel poco común y la SIP no se ha pronunciado sobre esta posición de la prensa. De igual forma, la desvalorización de la lucha de los familiares de oposición no ha sido tema para la SIP, dijeron fuentes consultadas.
Mientras todo esto sucede, con la complicidad por acción y la omisión de otros grupos, Nicaragua se sigue deteriorando.
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