Redacción. La luz del infinito: una frase que define a la futura Miss Universo y su corona, dúo que se volverá inseparable a partir de este sábado 16 de noviembre cuando, en el Arena CDMX de México, se conozca a la nueva mujer más hermosa del planeta.
127 mujeres de todo el mundo están concentradas en Ciudad de México para representar a sus países y mostrar que la belleza no sólo se mide por el físico, el porte y una sonrisa perfecta. Es por eso que la organización decidió crear una nueva corona, que honrará los valores y cualidades de la mujer que suceda en el trono a la nicaragüense Sheynnis Palacios.
Lumiere De L’Infini, la nueva corona de la futura Miss Universo
La joya fue una invención de la marca filipina Jewelmer, creada por el joyero francés Jacques Branellec y el empresario filipino Manuel Cojuangco en 1979. Ubicada en el Pacífico, la empresa tiene granjas de perlas, de dónde extraen el mejor material para crear íconos como esta corona.
La tiara, que reúne elementos de las coronas más preciadas, fue presentada por la actual Miss Universo, Sheynnis Palacios. También a la directora ejecutiva y fundadora del conglomerado tailandés dueña de Miss Universe, Anne Jakrajutatip, y a Raúl Rocha, presidente de la franquicia.
La corona, elaborada por artesanos filipinos, cuenta con 23 perlas doradas que hacen juego con zarcillos de diamantes y una base de oro puro. Y es que «recuerdan la espuma del mar que llega a las costas y el aire que sopla sobre las olas», según manifestó Jewelmer.
La joya representa un homenaje a la vida y sus elementos universales, «los rayos adornados con diamantes reflejan la luz y el fuego que emana del sol» y que, además, tiene los elementos entrelazados para destacar la coexistencia con la madre naturaleza.
Fueron cinco años de trabajo en la creación de la corona, que tiene un valor estimado de 5.3 millones de dólares. Es decir, más de 129 millones de lempiras.