Redacción. El embajador de Argentina ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), Carlos Bernardo Cherniak, cuestionó fuertemente la presencia del consejero Marlon Ochoa en la sesión extraordinaria de este martes.
Durante el encuentro, donde se discutió sobre la transparencia electoral en Honduras, el diplomático sudamericano lamentó que Honduras no enviara al presidente del Tribunal de Justicia Electoral (TJE), Mario Flores Urrutia, o a la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Ana Paola Hall.
Seguidamente, Cherniak arremetió contra Ochoa. “Resulta tristemente famosa por sacarse un autorretrato que lo muestra festejando frente a un ataque vandálico a la embajada de un país miembro de esta organización”, dijo.
El señalamiento del embajador argentino hace referencia a los hechos ocurridos durante las protestas de 2017 en Honduras.
La oposición de ese entonces, a la que pertenecía Marlon Ochoa, denunciaba fraude electoral que otorgó la reelección al expresidente Juan Orlando Hernández.
Durante esas manifestaciones, un grupo de personas incendió la entrada de la Embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa y Ochoa se tomó una fotografía en el lugar, dando la impresión de celebrar el acto vandálico.
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El diplomático argentino amplió sus cuestionamientos al señalar una serie de situaciones que, según dijo, han generado preocupación regional sobre el proceso electoral hondureño.
“Imagínense ustedes, por un minuto, que alguien que participa en un acto vandálico contra una de nuestras embajadas lo recibamos en nuestra casa de la democracia de las Américas, hablando de manera independiente de elecciones transparentes y limpias en su país”, cuestionó.
El representante de Argentina también expuso que la situación hondureña presenta hechos “inéditos” que, a su criterio, justifican la convocatoria del Consejo Permanente.
Entre ellos mencionó la paralización del pleno del Tribunal de Justicia Electoral y presuntas presiones políticas hacia magistrados.
También, remarcó el ingreso irregular de agentes del Ministerio Público a instalaciones del TJE y campañas difamatorias contra el órgano electoral.
Asimismo, señaló que estas acciones se suman a un “quiebre del orden constitucional”, al recordar el prolongado receso del Congreso Nacional, el funcionamiento de una comisión permanente sin legitimidad de origen y el uso extendido del estado de excepción en pleno proceso electoral.
Cherniak advirtió que incluso la misión electoral de la OEA expresó preocupación por medidas que, a su juicio, afectan la autonomía de las autoridades electorales.
Por ello, remarcó que existe “un elefante en la sala” y defendió la sesión extraordinaria como un acto de diplomacia preventiva para asegurar que en Honduras no haya interferencias, presiones ni manipulaciones en los resultados de las elecciones.
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