Redacción. Un policía de Australia le disparó con un táser a una anciana de 95 años que se desplazaba con un caminador y con un chuchillo en mano. Tras el ataque la dama permanece en estado critico y las autoridades ya investigan el hecho.
La dama de nombre Clare Nowland, quien padece de demencia y por ahora esta internada en un hospital australiano.
Los hechos acontecieron el pasado miércoles cuando la policía acudió a la residencial de los abuelos de Yallambee, en la localidad de Cooma -a unos 430 kilómetros al suroeste de Sídney, en respuesta a una llamada de emergencia.
Tras el suceso, se ha generado gran indignación entre las personas, debido a que la abuelita esta al borde de la muerte.
Andrew Thaler, un defensor de la comunidad local, dijo que la familia de Nowland, que incluye ocho hijos y docenas de nietos y bisnietos, se turnan para cuidarla junto a su cama.
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La señora estaba armada
Peter Cotter, comisionado asistente de la Policía de la región de Nueva Gales del Sur, mencionó en una conferencia de prensa tras los hechos que, «ningún agente, ninguno de nosotros, está por encima de la ley. Todas nuestras acciones se examinarán minuciosamente».
Asimismo, Cotter señaló que la dama era una paciente, que padece demencia. A la vezm puntualizó que estaba «armada» con un cuchillo de carne en una de las habitaciones de la residencia.
Los policías le pidieron a la anciana soltar el cuchillo, pero ella se nego y se fue acercando lentamente con su andador en contra de los agentes. Fue allí cuando el oficial de policía le disparó con el táser para reducirla.
La descarga eléctrica propició que la abuela, de unos 43 kilogramos de peso y 1,57 centímetros de altura, cayera y se golpeara la cabeza contra el suelo, informaron medios locales.
Investigación en contra del oficial
Tras el ataque, efectivos del departamento contra homicidios participan en las pesquisas en torno a la respuesta del agente policial. El uniformado tiene doce años de experiencia, para determinar si tiene alguna responsabilidad en este incidente, precisó Cotter a la prensa.
La actuación del oficial de policía ha puesto de nuevo de relieve el polémico uso de los táser por parte de la policía australiana. Esta situación se ha cuestionado por organizaciones garantes de derechos como Amnistía Internacional.
