TEGUCIGALPA, HONDURAS. A través de una carta dirigida al pueblo de Colón se dio a conocer la inquietud y temor que viven los pobladores ante la posible privatización del Hospital San Isidro.
Este hospital brinda asistencia a pobladores de varias comunidades aledañas. Es de señalar que en Colón hay dos hospitales, el San Isidro en Tocoa y el Salvador Paredes en Trujillo. Ubicados a una distancia aproximada de 50 kilómetros uno del otro.
En ese sentido, el San Isidro es el hospital regional. Atiende a personas de Colón, Gracias a Dios, parte de Plancho, Yoro y Atlántida. Mientras que el de Trujillo es de menor cobertura.
La lucha para que el Hospital San Isidro siga siendo un hospital público comenzó hace más de un año, según la carta. En ese entonces los lugareños realizaron un plantón exigiendo el derecho a la salud pública.
“La salud pública de calidad es un derecho humano igual que el agua. Ambos derechos están íntimamente relacionados y asumidos por el Estado de Honduras en el artículo 145 de la Constitución de la República. Mientras se deterioran hasta el extremo las condiciones físicas, higiénicas y administrativas del hospital, se corre el riesgo de ser un bien público candidato a la ‘descentralización’ o concesión a particulares”, dice el documento.
A esta comunidad le ha tocado luchar por ambos derechos. Pues actualmente libran una lucha tenaz contra Inversiones Pinares. Dicha empresa ha contaminado todas las fuentes de agua de la zona.
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Carta al pueblo de Colón
«Estimados amigos y amigas de los diferentes rincones del municipio y departamento, un abrazo fuerte en la acción solidaria por la vida.
Hace más de un año, el Comité Municipal tuvimos conversaciones con la dirección del Hospital San Isidro después de un plantón exigiendo el derecho humano a la salud pública ante la iniciativa gubernamental de entregar la administración del hospital a una junta externa, lo que para nosotros era y sigue siendo privatización de la salud pública.
En aquel momento dejamos acuerdos de interés común en la defensa del hospital. El equipo técnico de evaluación comunicó mediante un informe escrito que el hospital era ya un foco de contaminación, y un equipo estadounidense de naturaleza técnico militar indicó que el hospital debía cerrase por alto nivel de contaminación. Nos planteamos la necesidad de luchar porque la Secretaría de Salud construyera el sistema de tratamiento de las aguas grises para evitar más contaminación en el hospital quedando la dirección de elaborar una propuesta de presupuesto y juntos gestionar, pero no nos comunicó nada la dirección del hospital. Recuerdo que ante la ex gobernadora departamental planteamos incluso la necesidad de un nuevo hospital porque el actual ya no es ambientalmente factible en el centro de la ciudad.
La salud pública de calidad es un derecho humano igual que el agua. Ambos derechos están íntimamente relacionados y asumidos por el Estado de Honduras en el artículo 145 de la Constitución de la República. Mientras se deterioran hasta el extremo las condiciones físicas, higiénicas y administrativas del hospital, corre el riesgo de ser un bien público candidato a la ‘descentralización’ o concesión a particulares.
Comité municipal
Hoy, el Comité Municipal expresa que la lucha exigente del derecho humano a la salud es un deber ciudadano, y es una responsabilidad del gobierno. ¡Apena que los pacientes y empleados estén en un centro de contaminación por orines de ratas o por la acumulación de heces y todo el sucio que el centro hospitalario produce!
La garantía de la salud empieza por el amor a la vida. La Secretaría de Salud tiene una responsabilidad constitucional de asumir, el pueblo que reclama su derecho tenemos nuestra responsabilidad de estar organizado, informado y movilizado. No hay un derecho humano que el Estado garantice si el pueblo se duerme. La burocracia estatal cae en la rutina y muchas veces en la corrupción, los empresarios y comerciantes de la vida están pendientes para apropiarse de lo público y no duermen. Por eso, ante la emergencia del riesgo, la asamblea presente debe acordar las tareas y acciones necesarias para defender el hospital, para garantizar higiene y esperanza al pueblo.
La lucha implica sentarse nuevamente con la autoridad correspondiente para abordar la problemática integralmente, implica fortalecer o reconformar la Comisión Ciudadana de Salud, implica un estudio técnico para orientar la exigencia de construir un nuevo centro hospitalario en una zona apta ambientalmente, implica movilizarse a la capital para poner en contexto nacional la violación al derecho humano a la salud en la región, implica una asamblea de trabajo con todos los alcaldes, el gobernador y los 8 diputados de Colón junto al Comité Departamental para definir el plan de lucha por el derecho a la salud, implica unidad popular y decisión frontal para cambiar esta situación.
Grave situación
La situación es grave y requiere un tratamiento adecuado. Las inversiones parciales y atención a cuestiones específicas hacen más crudo el sufrimiento del pueblo, es un momento oportuno para recomponer todo el regido social y la administración en función del objetivo central, la garantía de la salud pública en condiciones aptas, el pueblo tiene derecho a vivir y vivir dignamente.
Tocoa, Colón, 22 de septiembre 2018
Juan López
Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos».
