Tegucigalpa, Honduras. Mientras se acerca la última ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Honduras y China, distintos sectores están pidiendo a la Comisión Negociadora que evite firmarlo, debido a que el único beneficiado sería el país asiático, y en su lugar sugieren dejarlo en manos del próximo gobierno que toma posesión en enero de 2026.
Y es que recientemente las autoridades hondureñas anunciaron que entrarán en la octava y última fase de negociación del TLC con China. En meses anteriores, las autoridades reconocieron que Honduras no puede competir con el gigante asiático en el intercambio de mercancías, debido a que Honduras no es un país industrial y la diversidad de la producción local no se acerca ni a la mitad de la oferta que puede ofrecer el nuevo aliado del gobierno.
Además, uno de los puntos más discutidos y preocupantes para diferentes sectores es que China no reconoce la asimetría de la economía hondureña.
Aun sin TLC entre ambos países, en las principales ciudades de Honduras es palpable cómo el producto chino está desplazando la producción local, así como la presencia de tiendas de personas originarias de China. Situación que podría tener un incremento significativo, lo que expertos tildaron de una «invasión» y el fin para los emprendedores y pequeños productores hondureños.
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Evitar firmarlo
El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa (CCIT), Daniel Fortín, recomendó a las autoridades que “tengan mucho cuidado con esa negociación y que se beneficie a los hondureños”.
Menotti Maradiaga, miembro de la Cámara de Comercio de Industrias de Cortés (CCIC), es del criterio de que las autoridades hondureñas no deben firmar el TLC, porque no visualizan beneficio alguno.
“Honduras ha dejado de producir por no contar con leyes que vengan a volver más atractiva la producción nacional y a beneficiar a los productores. El TLC va a sepultar a los pequeños productores y al sector MIPYME… Honduras no está lista para suscribir un TLC con China, porque no estamos fortalecidos y carecemos de competitividad. El único beneficiado será China”, comenzó diciendo.
Maradiaga expuso que se deben cuidar a los distintos sectores productivos, debido a que no se puede competir con el mercado chino. Además, avizora un panorama complicado para que se puedan exportar los distintos productos que ofrece Honduras.
“Yo no suscribiría ningún tratado a menos que venga a beneficiar a sectores como el turismo, que al menos un 1% de la ciudadanía china venga a hacer turismo y visitas de negocios, pero en cuanto a la producción hondureña no se compara, además, por los bajos costos que tienen los chinos… China está protegida en cuanto a todos los rubros, un TLC vendrá a beneficiar a solo unos pocos”, dijo.
Agregó que “veamos a nuestros hermanos de Costa Rica, ellos tienen mayor Producto Interno Bruto. Ellos han entrado más mercadería de lo que han podido enviar (a China)”.
El próximo gobierno e infraestructura
Sobre el tema, el experto en relaciones internacionales, Graco Pérez, expresó que la firma del TLC con China debe quedar en manos del próximo gobierno, por la falta de personas capacitadas para negociar, las implicaciones económicas, de infraestructura y el año político que enfrentan los hondureños.
“Negociar un TLC con la segunda potencia económica del mundo que produce diferentes productos, versus nuestro mercado», no es conveniente, sostuvo Pérez.
«Ellos tienen intereses más geopolíticos y con temas comerciales, lo utilizan para presionar a nuestro país… Si nosotros lo firmamos, la asimetría va a aumentar drásticamente el déficit comercial”, indicó.
Pérez opinó que el TLC lo están utilizando las autoridades hondureñas para crear expectativas de que el comercio va a aumentar y el país tendrá un desarrollo con los lazos con China. “El problema es que nosotros producimos lo mismo, ni siquiera antes podíamos satisfacer los mercados de nuestros países aliados, menos vamos a poder con un país como China”, sostuvo.
“Beneficios del TLC no habrá, más bien será un daño para la economía, pequeñas empresas, comerciantes y emprendedores. Ya lo estamos viendo en las principales ciudades del país, con productos y personas de origen chino”, expresó.
Además, el experto apuntó que la firma del TLC vendría a debilitar aún más las relaciones con Estados Unidos, el principal socio comercial de Honduras, y que sería un punto negativo ante la próxima posible revisión del Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica, República Dominicana y Estados Unidos (CAFTA), anunciado por las autoridades estadounidenses.
“Creo que ya en un año electoral, no es conveniente que Honduras firme este TLC (con China). Debería corresponder al otro gobierno, porque las implicaciones económicas que tendría son bastante grandes”, concluyó.
¿Podría desaparecer la industria local?
Marcos Jaramillo, académico chileno, experto en negocios internacionales y derecho en Asia, expuso que un TLC mal negociado podría desaparecer la economía local, debido a que las asimetrías son enormes.
“Si ese tratado no ha sido bien negociado, puede quebrar a toda la industria hondureña. De hecho, los grandes industriales hondureños, los medianos y los pequeños, no tienen capacidad para hacer frente a esto”, apuntó.
Recomendó a los negociadores que deben analizar bien el tratado para proteger la industria local.
“Ojalá China le dé esa ventaja a Honduras de que por lo menos unos años de gracia en los cuales Honduras pueda exportar productos con cero aranceles a China. Pero los productos chinos que lleguen acá con arancel determinado, por lo menos por un tiempo para que Honduras pueda asimilar ese cambio”, cerró.
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