La jugada transcurrió sobre el vértice izquierdo del área de la defensa de Nacional. Berrío le pegó una patada desde atrás al jugador japonés y tuvo que trasladarse hasta la banda para apreciar la acción en el vídeo. Determinar la jugada -la falta fue clara- y pitar el penalti para el Kashima Antlers.
El penalti finalizó en gol gracias al derechazo de Doi al que nada pudo hacer Armani, que se tiró al otro lado.
El colegiado húngaro ya había pasado a la historia por convertirse en el árbitro más joven en arbitrar una final de la Champions League. Lo hizo con 35 años en el partido definitorio entre Barcelona y Manchester United, que se disputó en Roma.
FALLON TECNOLOGICO
Si bien la tecnología determinó la falta de Berrío contra Nishi, esta no dio cuenta que el japonés estaba en off side.
Nishi siempre estuvo en off side, a la espera del cobro. Cuando se ejecuta, intenta meterse entre los defensores del Atlético Nacional. Pero choca con Berrío, por lo que su posición no pasa a ser válida.
Sin embargo, los árbitros no vieron eso y solo evaluaron el choque entre Berrío y Nishi.
El Kashima Antlers, campeón de Japón, culminó la sorpresa y se clasificó para la final del Mundial de Clubes al imponerse por 3-0 al Atlético Nacional colombiano en la primera semifinal disputada en el estadio Suita City de Osaka.