CHAMELECÓN, SAN PEDRO SULA. En una operación de vigilancia y seguimiento se capturó a dos personas mayores de edad del sexo masculino.
Uno de los detenidos responde al nombre Nelvin David Aguilar Godines, alías «el alacrán», de 25 años de edad. Se supo que es originario de Gracias, Lempira y residente en el barrio San José.
Junto a él, José Eduardo López Zelaya, alías «joche», de 25 años de edad. Originario de San Pedro Sula y reside en la colonia, Los Zorzales.
Según autoridades policiales, los detenidos en mención son miembros activos de la mara MS-13. Además, los acusan de cometer el delito de extorsión en el sector antes mencionado.
Posteriormente, ambos fueron remitidos a los juzgados correspondientes. A los detenidos se les responsabiliza de cometer el delito de extorsión continuada, en perjuicio de varios testigos protegidos y portación ilegal de armas.
OBJETOS DECOMISADOS
Durante la captura se decomisó la cantidad de Lps. 41,441.00, producto del cobro de la extorsión. También un teléfono celular, marca iphone, color blanco y siete libretas con la contabilidad del cobro de la extorsión. Además, un arma de fuego tipo pistola, calibre 9mm, cromada. Tres cargadores para arma de fuego tipo pistola, calibre 9mm. Treinta proyectiles, calibre 9mm y dos chalecos antibalas.
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ANTECEDENTE
El pasado mes de junio capturó a un presunto pandillero de la mara MS-13, vinculado a una masacre en Chamelecón, zona norte de Honduras.
Se trataba de Edwin Alexander López Castellanos, alias «Barny», capturado en la colonia Sabillón Cruz.
A López Castellanos se lo vinculó con la masacre suscitada el pasado 31 de mayo, donde fallecieron cuatro personas, entre ellas, el abogado Jorge Alberto Topete. Además tres presuntos integrantes de la Pandilla 18, identificados como José Bernabé Martínez Mejía, Jimmy Florentino Linares Castro y José Sergio Lagos Rodríguez.
Según Eny Vega, portavoz de FUSINA, la entidad realizaba operativo de allanamientos en conjunto con la Policía Militar, cuando detuvieron a «Barny». Según su informe, el sujeto tienen antecedentes por sicariato y se le acusará por portación ilegal de armas e intento de soborno a un agente policial.
Al parecer, López portaba más de L. 8,000 y trató de entregarlos a cambio de su libertad. Se le decomisó el dinero y un arma de fuego calibre 9mm con tres cargadores y 56 proyectiles sin percutir.
