CORTÉS. Dos presuntas pandilleras que usaban a un menor de edad como señuelo para exigir el pago de la extorsión y así librarse de la justicia.

Fueron descubiertas ayer miércoles e inmediatamente arrestadas en un punto de esta ciudad, al norte del país.

Tras recibir información de que las dos mujeres se desplazaban por diferentes sitios cobrando el mal llamado “impuesto de guerra”.

Agentes de la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA), montaron vigilancia para tratar de dar con su paradero.

Fue así como les dieron captura a Geraldina Perdomo Fajardo (30) y Eva Jessenia Peña Gutiérrez.

Quienes enviaban a un niño a los diferentes comercios a cobrar extorsión y de esa manera evitar ser descubiertas por las autoridades.

De acuerdo a las autoridades de la FNA, las mujeres supuestamente forman parte de la pandilla la 18. Y mantenían atemorizados a los propietarios de negocios de esta ciudad y alrededores, pues a pesar de quererse esconder detrás del menor.

Están identificadas como las responsables de cobrar el mal llamado “impuesto de guerra”.

Por lo que al momento de ser arrestadas se les decomisó una cantidad de dinero.

Decomisan ‘cebolla electrónica’ con gran poder de destrucción

Un fuerte decomiso de pólvora valorado en más de 700 mil lempiras llevó a cabo ayer la Policía Municipal, en el Barrio Medina. Los operativos se realizaron en una vivienda localizada entre las 7 y 8 calles.

Así como en diversos locales del mercado Medina, concretamente sobre la 6 calle, entre 5 y 6 avenidas.

La Policía recibió información de que en dichos puntos se almacenaba grandes cantidades de productos elaborados a base de pólvora. Por lo que se procedió a su decomiso y advirtió que en los próximos días harán nuevos operativos.

Detalló que entre la gran cantidad de productos requisados se encuentra uno denominado “cebolla electrónica”. Pues se activa conectándola a una batería. El explosivo de alto poder destructivo está equipado con una mecha larga de colores.

Además, una etiqueta con un instructivo de advertencia escrito en otro idioma. “Esta cebolla electrónica es peligrosa, porque puede causar serias heridas, amputaciones y hasta comprometer la vida de una persona”, resaltó López.

También se decomisó morteros grandes, medianos y pequeños, cebollas de todo tamaño, luces de bengala. Así como metralletas de diferente poder explosivo, cohetes caballo rojo, cachiflines y otros.

“En estos puntos también hicimos decomiso de materia prima para la fabricación de todos estos explosivos. Y multó a los propietarios hasta con 20 mil lempiras, como manda la ley”.