Redacción. Tras la advertencia del secretario estadounidense, Marco Rubio, sobre la revocación de visas a funcionarios que respalden las misiones médicas cubanas, la permanencia de estos profesionales en Honduras vuelve a quedar en entredicho, en medio de crecientes dudas sobre quién financia sus salarios y bajo qué condiciones ejercen en el país.
En febrero del año pasado, una brigada de entre 96 y 98 médicos cubanos, en su mayoría especialistas, arribó al país. Sin embargo, las autoridades no ofrecieron mayores detalles sobre su distribución, salarios y funciones a desempeñar.
De acuerdo con un compendio publicado en Washington denominado, «Las brigadas médicas cubanas, trabajo forzoso con fachada altruista» por el Proyecto Sociedad Libre (Free Society Project por sus siglas en inglés), actualmente 177 cubanos integran la misión de médicos en Honduras.
Secretarías vinculadas
El año pasado, tras la llegada de los galenos, la ministra de Salud, Carla Paredes, aseguró que el pago a los médicos sería cubierto durante dos años por la Secretaría de Planificación Estratégica. Sin embargo, Diario Tiempo consultó los portales de transparencia de las secretarías de Planificación y Salud, pero no encontró ningún desembolso destinado a los especialistas.
La última misión de médicos cubanos arribaron a tierras hondureñas el 27 de febrero del 2024. Las instituciones hondureñas vinculadas en la llegada y servicio de las brigadas médicas al país son:
- Secretaría de Planificación Estratégica (SPE)
- Cancillería de Honduras
- Instituto de Jubilaciones y Pensiones de los Empleados y Funcionarios del Poder Ejecutivo (Injupemp)
- Secretaría de Salud (Sesal)
- Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol)
En un comunicado, el Departamento de Estado de EE. UU. citó que, «el programa cubano de exportación de mano de obra abusa de los participantes, enriquece al corrupto régimen cubano y priva a los cubanos ordinarios de la atención médica esencial que necesitan desesperadamente en su país».
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¿Convenio o contratación?
Tras darse a conocer la medida que tomaría Estados Unidos (EE. UU.) referente a los funcionarios que apoyan y promueven las brigadas de médicos procedentes de Cuba, el director del Injupemp, Amable de Jesús Hernández, indicó a periodistas en San Pedro Sula que lo que hay suscrito con el gobierno de la isla es un acuerdo basado en el derecho internacional.
«Es un convenio bilateral. Este es suscrito por la Cancillería de Honduras y la Cancillería de Cuba, en representación de los dos gobiernos. Es una relación entre Estados que se rige por el derecho internacional y no es una relación contractual laboral», expresó el funcionario.
Asimismo, explicó que la beneficiada con este convenio es la Secretaría de Salud (Sesal). Esto, porque es quien aloja a los médicos cubanos en los hospitales a nivel nacional.
De acuerdo con Amable de Jesús Hernández, la misión cubana está presente en 57 países y en el caso particular de Honduras, data desde 1998, tras los embates del Huracán Mitch. A su vez, refirió que en el país están por ahora 98 galenos, cantidad menor a la de Guatemala, donde hay más de 500.
Por otro lado, señaló que una de las funciones de «la misión médica cubana, es la Operación Milagro. Se han aperturado tres centros oftalmológicos, en Colinas (Santa Bárbara), Siguatepeque (Comayagua) y Tegucigalpa (Francisco Morazán). Además se van a aperturar dos más, uno en Catacamas y otro en San Pedro Sula».
Según el funcionario, a la semana, al menos 200 pacientes han recuperado su vista de manera gratuita con las intervenciones quirúrgicas en los ojos que realizan los médicos cubanos.
Salarios que devengan
En abril del año pasado, el Colegio Médico de Honduras (CMH) interpuso una denuncia al Ministerio Público (MP) para que se investigara dónde están y cuál es el trabajo realizado por los cubanos.
Según el doctor Samuel Santos, presidente del CMH, también se solicitó a secretarías como Sedesol, la Sesal e Injupemp el convenio firmado para conocer el salario de los médicos, pero nunca lo recibieron.
«El señor Amable de Jesús dijo a los medios de comunicación, hace como un año, que el salario era de unos 1,500 dólares (39 mil 109 lempiras) más el trasporte, vivienda y alimentación que se les da», indicó Santos.
En consecuencia, la inversión que el Estado de Honduras estaría haciendo de manera mensual en los salarios de esos 96 galenos que llegaron en 2024 sería de: 3 millones 754 mil 464 lempiras (aproximadamente), sin incluir gastos de hospedaje, trasporte y alimentación.
Beneficiados
El compendio “Las brigadas médicas cubanas: trabajo forzoso con fachada altruista” describe que los médicos cubanos solo reciben entre el 2,5% y el 20% del total que paga el país anfitrión, el resto lo captaría el régimen cubano.
Además, la investigación sostiene que Cuba cobra a los países anfitriones entre $3.000 y $12.000 mensuales por cada médico, dependiendo del país y la especialidad. Aparte de ese salario entregado al gobierno, los países anfitriones cubren vivienda, alimentación, transporte, viajes y otros beneficios a los profesionales.
El informe concluye que solo en 2023, el régimen cubano reportó ingresos de $4.400 millones de dólares por exportación de servicios “personales, culturales y recreativos”, categoría que incluye los servicios médicos. Esta cifra fue más de tres veces lo que ganó por turismo el país ese año.
Denuncias del CMH
El doctor Samuel Santos recalcó: «nos hemos pronunciado en el pasado, se ha hecho mal uso de las brigadas médicas. Nosotros habíamos instado a las diferentes instancias del gobierno, Sesal, Injupemp, indicándoles que existía temporalidad. Es decir, que una brigada extranjera no puede durar más de tres meses en el país».
Asimismo, Santos comentó que este personal médico extranjero tiene que acreditarse en el CMH, para así certificar que tienen los títulos y especialidades para el ejercicio de la medicina. Del mismo modo, recordó que la atención brindada debe ser gratuita y solo por tres meses.
«No se cumplió con ninguno de los criterios. Por lo tanto, nos vimos obligados como CMH a presentar una denuncia ante el Ministerio Público (MP), y la que está en marcha hace algunos meses», añadió.
Continúan laborando
El doctor Samuel Santos reiteró que los médicos cubanos siguen laborando en Honduras, pese a que llevan más de un año como brigada.
«Hay varios médicos hondureños que están sin trabajo y, sin embargo, los médicos extranjeros, como ser los colegas cubanos, están laborando y se les paga un salario, además de la alimentación, transporte y alojamiento. Esas facilidades no se le dan a un médico hondureño que está desempleado en el país».
Según Santos, ellos han solicitado a las autoridades de gobierno información referente a los salarios de los médicos cubanos. Pero no han obtenido respuesta, por lo que desconocen con exactitud cuánto dinero devengan mensualmente.
Visión de EE. UU.
Graco Pérez, analista y experto en diplomacia, coincidió con las declaraciones del doctor Santos y resaltó que los galenos cubanos no cuenta con la certificación de parte del CMH. Es así que hasta ahora no se sabe si cuentan con las capacidades y formación necesaria para poder ejercer en Honduras.
Otro punto que destacó Pérez es que en Honduras existen médicos con alta formación y permanecen desempleados. A todos ellos, el sistema social y gubernamental los podría absorber, garantizando las atenciones en los hospitales.
El experto también resaltó que la visión de parte de EE. UU. es que los médicos cubanos son víctimas de «explotación laboral» y que se estaría apoyando a un régimen gubernamental que no es democrático, catalogado por el país norteamericano como «terrorista».
«Esto no es cooperación, Honduras está pagando la presencia de esas brigadas médicas al gobierno de Cuba y ellos les pagan a los médicos. Al final no sabemos, las cifras son confusas, no se sabe cuántos médicos hay, si en realidad son profesionales y cuánto nos cuesta cada servicio que prestan», expresó Pérez.
Pese a que el gobierno presenta las brigadas médicas de Cuba como una alternativa al precario sistema de salud nacional, se desconoce el monto exacto que Honduras paga al régimen socialista de la isla, así como la función específica de los galenos y las zonas donde están distribuidos. Mientras tanto, desde Estados Unidos, esta práctica es catalogada como un sistema de explotación laboral.
