REDACCIÓN. En una operación conjunta entre la Armada de Colombia y la Fuerza de Tarea Conjunta e Interagencial del Comando Sur de Estados Unidos, fue incautado un cargamento de 199 kilogramos de clorhidrato de cocaína en aguas del Archipiélago de San Andrés y Providencia. En el operativo resultó capturado un hondureño y dos ciudadanos colombianos.
La acción se inició tras una alerta recibida por la Estación de Guardacostas de San Andrés. Se detectó una lancha tipo Go Fast —conocida en Colombia como “langostera”— intentando evadir el control marítimo. Durante la persecución, los tripulantes arrojaron varios bultos al mar, los cuales se recuperaron con el apoyo del buque Victoria y otras unidades navales.
De acuerdo con el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), la Prueba de Identificación Preliminar Homologada (PIPH) confirmó que los ocho bultos recuperados contenían cocaína, con un peso total de 199 kilos. Según estimaciones de las autoridades, la droga tendría un valor aproximado de nueve millones de dólares en el mercado ilícito. Su decomiso impide que más de 496,000 dosis lleguen a su destino final.

Le puede interesar: Droga en alta mar: Panamá frustra traslado de 230 paquetes en el Pacífico
Los tres capturados se encuentran a disposición de las autoridades judiciales y enfrentarán cargos por fabricación, porte y tráfico de estupefacientes. Se desconoce la identidad de los arrestados. La Armada de Colombia señaló que este golpe representa una afectación significativa a las finanzas de las organizaciones criminales que operan en la región del Caribe.
En lo que va de 2025, la Armada de Colombia ha decomisado más de 327 toneladas de cocaína. Se ha consolidado como la fuerza naval con mayor número de incautaciones a nivel mundial. Además, ha confiscado 55 toneladas de marihuana, interceptado 10 semisumergibles y desmantelado estructuras de minería ilegal. También han recuperado más de 30 embarcaciones utilizadas para el tráfico ilícito.
El almirante Juan Ricardo Rozo destacó que este tipo de operaciones confirman la importancia de la cooperación internacional para desarticular las redes del narcotráfico desde la producción hasta el transporte marítimo.