Redacción. El sacerdote jesuita Ismael Moreno, conocido como Padre Melo, ha elevado un llamado urgente al fiscal general, Johel Antonio Zelaya, a quien solicitó que no se archive el caso del ambientalista Juan López, asesinado el 14 de septiembre del 2024 en el Bajo Aguán, en la región del Caribe hondureño.
A través de un mensaje publicado en su cuenta de X, el líder religioso expresó el dolor y la indignación que embargan a la comunidad de Tocoa, a los familiares de López y a las organizaciones defensoras del medio ambiente.
“Señor fiscal general, con el respeto que usted siempre se merece, y desde el dolor y angustia de su esposa, sus hijas y muchas personas de la comunidad de Tocoa y organizaciones ambientalistas, le ruego no deje que se archive en la impunidad el crimen. de Juan López”, escribió.
Lo expresado por el sacerdote se suma a las decenas de llamados por parte de organizaciones, ministerios y personas particulares. Diversas organizaciones, entre ellas el Bufete Justicia para los Pueblos y la Coalición contra la Impunidad en Honduras, se han unido en la exigencia de justicia para Juan López. También, han exigido la protección para su familia.
El crimen
López, quien encabezaba el Comité Municipal en Defensa de los Bienes Comunes y Públicos de Tocoa (CMDBCPT), fue atacado por hombres armados mientras se encontraba en su vehículo en un área concurrida del municipio.
Por este caso hay tres personas imputadas como sospechosas del crimen que están cumpliendo la medida de prisión preventiva.
Los acusados en el caso son:
- Óscar Alexi Guardado Alvarenga (27 años), señalado como el autor material del asesinato.
- Lenín Adonis Cruz Munguía (30 años)
- Daniel Antonio Juárez Torres (31 años), presuntos cómplices.
Según las investigaciones, el día del asesinato, Cruz y Juárez le entregaron una motocicleta Yamaha, modelo XTZ-125E, con la que Guardado llegó al lugar de los hechos y luego escapó.
Investigaciones del Ministerio Público apuntan que Guardado habría vigilado previamente los movimientos de López en la iglesia San Antonio de Padua, en la colonia Fabio Ochoa. Estando en ese lugar, finalmente le disparó, causándole la muerte de manera inmediata.