Redacción. Una alarmante ola de ataques sacudió la ciudad de Cali este martes, dejando un saldo preliminar de al menos una persona muerta y nueve heridas.
Tres explosiones de bombas, deliberadamente dirigidas contra puestos policiales en la capital del departamento del Valle del Cauca, sembraron el pánico y la incertidumbre entre la población. El secretario de Seguridad de Cali, Jairo García, confirmó a los periodistas la trágica cifra: «En este momento tenemos un reporte preliminar de una persona fallecida y nueve lesionadas».
Los implicados activaron los artefactos explosivos en puntos estratégicos de la ciudad. Una de las bombas, que al parecer había sido colocada en una motocicleta, detonó con fuerza en el barrio de Meléndez.
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Una segunda explosión sacudió el Manuela Beltrán, y una tercera se registró en el sector de Los Mangos, según detalló el funcionario. Previamente, el alcalde de Cali, Alejandro Eder, utilizó su cuenta oficial en X para informar que los equipos de emergencia estaban atendiendo la situación de inmediato.
«Nuestra fuerza pública ya está en el lugar y los equipos de salud atentos ante cualquier eventualidad», indicó el mandatario local. Las primeras imágenes difundidas tras los atentados mostraban escenas desgarradoras, con varias personas tendidas en la calle, mientras transeúntes y policías intentaban desesperadamente socorrerlas. La situación se agravó con el reporte de otra explosión en Jamundí, un municipio cercano a Cali, lo que sugería una acción coordinada.
Alta tensión
En este sentido, la serie de ataques adquiere una dimensión aún más crítica al producirse tan solo un día antes de la programada visita del presidente colombiano, Gustavo Petro, a Cali.
El mandatario tiene previsto participar este miércoles en una importante movilización popular. Los sindicatos convocaron la acción, cuyo objetivo es respaldar una consulta popular que el presidente busca convocar por decreto para aprobar su polémica reforma laboral, tras los importantes reveses sufridos en el Senado.
Las autoridades se mantienen en máxima alerta ante la posibilidad de nuevos incidentes y trabajan para garantizar la seguridad durante la jornada del miércoles.
