Redacción. El conmovedor caso de Sariah Amador, una estudiante que decidió poner fin a su vida a sus 15 años tras sufrir acoso escolar o bullying, ha despertado una fuerte reacción en su comunidad natal en Campamento, en el departamento Olancho.
Sariah Amador falleció el 31 de diciembre de 2024 luego de ingerir una sustancia tóxica. Según allegados, la joven sufría de un cuadro depresivo debido a las burlas constantes de sus compañeros. Su partida ha sido descrita como una pérdida irreparable de una «niña linda e inteligente, convertida en una estrella apagada por la crueldad».
En sus redes sociales, antes de morir, dejó lo que muchos interpretan como una despedida silenciosa. Su última publicación en Instagram incluyó la canción ‘Descansando’ de Fuerza Regida, un tema que aborda la pérdida repentina sin oportunidad de despedirse.
Amigos, familiares y conocidos de la adolescente han iniciado una campaña en redes sociales bajo el hashtag #JusticiaParaSariah con el objetivo de crear conciencia sobre los graves efectos psicológicos y físicos del acoso.
Campaña
El caso de Sariah ha motivado a los olanchanos a emprender acciones para evitar que otras familias pasen por un dolor similar. Con publicaciones en redes sociales buscan generar empatía y promover valores como el respeto y la solidaridad.
La tragedia ha generado una ola de mensajes reflexivos en plataformas digitales. Una de las amigas de la joven escribió un mensaje dirigido a los acosadores: «Podrán tener todo menos educación y empatía. Así como molestaban con arrogancia, ahora afronten las consecuencias de lo que hicieron».
Otra usuaria publicó en sus historias un llamado a los padres de familia. «Aprendemos a criar a nuestros hijos para que no sean quienes molestan a otros, pero tampoco los molestados. Como padres tenemos que estar atentos a nuestros hijos, a sus cambios de conducta; los tiempos no son los mismos, la mentalidad de los jóvenes es diferente. Nuestros hijos merecen ser escuchados y ayudados», escribió.
La familia de Sariah espera que la trágica muerte sirva como un recordatorio de las consecuencias del bullying y estar atentos a las señales de alerta tanto en niños como en adolescentes.
Si tú o alguien que conoces necesita ayuda existen líneas de apoyo en las que puedes encontrar orientación. En Honduras puedes comunicarte al 111 o buscar ayuda en centros especializados para la prevención del suicidio.
