Estados Unidos. Un modelo presentó una demanda civil en California en la que acusa al productor de cine y televisión Tyler Perry de abuso y agresión sexual. El denunciante asegura que Perry utilizó su posición de poder para aprovecharse de él con promesas de trabajo en la industria del entretenimiento, informó Telemundo Washington.
La demanda fue presentada el 25 de diciembre en un tribunal estatal de Los Ángeles por Mario Rodríguez. El documento solicita una indemnización de 77 millones de dólares y describe una relación de contacto que se extendió por casi cinco años. Durante ese periodo, Rodríguez afirma que Perry lo agredió sexualmente en varias ocasiones mientras hablaban sobre oportunidades profesionales.
El abogado de Perry, Alex Spiro, rechazó las acusaciones. En un comunicado emitido el viernes, calificó la demanda como un intento de extorsión y aseguró que fracasará.
Lea también: «Era la persona más amable y alegre»: muere querido actor de Friends
Según el expediente judicial, un entrenador del gimnasio donde Rodríguez entrenaba en 2015 le dijo que Perry quería conocerlo para hablar sobre un posible trabajo como actor. Rodríguez entregó su número telefónico y ese mismo día recibió una llamada del productor. Perry lo habría contactado para un proyecto que más tarde se convirtió en la película «¡Boo! A Madea Halloween».
¿Qué señala la demanda?
La demanda señala que Perry dijo haber visto su cuenta de Instagram y quedar impresionado con su trabajo como modelo. Al aclarar que no tenía experiencia actoral, Perry presuntamente le respondió: “Mario, no es mala persona para conocerte y tenerte de tu lado”.
Rodríguez asegura que durante un encuentro posterior en la casa de Perry, el productor le ofreció bebidas alcohólicas y lo tocó sin su consentimiento. Según la demanda, Perry le frotó los hombros y tocó la parte interna del muslo “justo al lado del pene”.
El documento describe encuentros posteriores entre 2017 y 2019. En ellos, Perry habría hablado de futuros proyectos mientras le hacía preguntas sobre su orientación sexual y realizaba tocamientos en la pierna y el pene. En una de esas reuniones, Perry habría tomado la mano de Rodríguez y la colocó sobre su pene mientras le decía: “Si tan solo estuvieras conmigo, te cuidaría y no tendrías que preocuparte por nada”.
La demanda afirma que en dos ocasiones, tras contactos no deseados, Perry le entregó pagos de 5,000 dólares. Rodríguez señala que decidió presentar la demanda después de conocer otra acusación pública contra Perry en junio. En ese momento, aseguró que “era hora de contar su historia, obtener justicia y detener definitivamente al Sr. Perry”.
Rodríguez sostiene que cuando dejó de responder a Perry, el productor le exigió mantener contacto mensual por mensajes de texto, pero no le ofreció trabajo adicional.
El caso también incluye como demandada a la empresa Lionsgate, distribuidora de los estudios de Perry. La demanda alega que la compañía no actuó pese a conocer la conducta del productor. “De no ser por el incumplimiento del estudio en la aplicación de sus cláusulas de moralidad y otras salvaguardas, las agresiones sexuales no habrían ocurrido”, sostiene el documento legal. Lionsgate no respondió de inmediato a solicitudes de comentarios.
A través de su abogado, Rodríguez respondió a cuestionamientos sobre por qué mantuvo comunicación cordial y aceptó dinero de Perry. “El apoyo financiero continuo y el acceso no son incompatibles con el abuso; a menudo forman parte de la dinámica de poder que lo acompaña”, afirmó. “La existencia de asistencia financiera no desmiente el daño”.
Segunda demanda
La demanda se suma a otra presentada en junio contra Perry. En ese caso, el demandante Derek Dixon lo acusa de tocamientos indebidos a cambio de oportunidades laborales. Esa acción legal, que busca 260 millones de dólares, fue trasladada a un tribunal federal en Georgia, donde Perry opera sus estudios y tiene residencia.
Ante la primera demanda, un abogado de Perry declaró: “Tyler no se dejará presionar y confiamos en que estas acusaciones falsas de acoso fracasarán”, recordó Telemundo Washington.
