Redacción. La Administración Federal de Aviación (FAA) anunció un alivio largamente esperado para la industria aérea estadounidense y millones de viajeros, al levantar todas las restricciones de vuelos comerciales impuestas en 40 de los principales aeropuertos del país.
La medida, efectiva a partir de este lunes 18 de noviembre a las 6:00 a. m. (hora del Este), permite a las aerolíneas reanudar sus horarios completos tras semanas de limitaciones causadas por el cierre gubernamental.
El fin de las restricciones fue confirmado en una declaración conjunta del secretario de Transporte, Sean P. Duffy, y el administrador de la FAA, Bryan Bedford.
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Del mismo modo, la orden de emergencia, vigente desde el 7 de noviembre, fue una consecuencia directa de la escasez crítica de personal en los centros de control aéreo, ya que los controladores trabajaron sin salario durante los 43 días del cierre.
Seguridad aérea
La FAA justificó las restricciones por motivos de seguridad operacional, citando un aumento de riesgos. El secretario Duffy señaló que los datos mostraban incidentes preocupantes, como aeronaves que se aproximaban demasiado y un incremento en las incursiones en pistas. La reducción progresiva de vuelos —que llegó a un pico del 6%— fue necesaria para «aliviar la presión sobre el sistema y gestionar la escasez de personal».
Las limitaciones afectaron a miles de vuelos en centros neurálgicos como Nueva York, Chicago, Atlanta y Los Ángeles. El 9 de noviembre, las cancelaciones alcanzaron su punto máximo con más de 2,900 vuelos afectados.
Sin embargo, la situación ha mejorado notablemente desde el fin del cierre gubernamental el 12 de noviembre. El descenso sostenido de incidentes y la reincorporación del personal permitieron a la agencia de seguridad aérea dar luz verde a la normalización total.
Con esta decisión, la industria aérea espera afrontar con solidez la inminente temporada alta de viajes, incluyendo el feriado de Acción de Gracias.
