Redacción. Un residente de Virginia fue condenado a cadena perpetua tras declararse culpable de delitos de odio por disparar a dos inmigrantes latinos que recién habían llegado a Estados Unidos, informó Agencia EFE citando al Departamento de Justicia (DOJ).
Douglas Wayne Cornett admitió su culpabilidad en dos cargos federales de odio por los hechos ocurridos la noche del 28 de febrero de 2024 en una gasolinera del condado de Spotsylvania.
Lea también: Michigan: hombre acusado de homicidio tras disparar a adolescente en garaje
Según documentos judiciales, Cornett siguió a una camioneta conducida por un latino identificado como O.G. hasta la gasolinera. Allí preguntó a otro latino, J.M., amigo de O.G., cuánto tiempo llevaban viviendo en Estados Unidos.
Al enterarse de que O.G. llevaba menos de dos años en el país, Cornett sacó una pistola y disparó seis veces. O.G. recibió tres impactos y J.M. uno. Después de huir, las autoridades lo arrestaron en su casa. Durante su interrogatorio, confesó que había disparado “debido a su percepción del origen” de las víctimas, según el DOJ.
Cornett también expresó su enojo por la inmigración. Dijo que estaba molesto porque los inmigrantes indocumentados recibían asistencia social, teléfonos y seguro médico, según documentos judiciales citados por WRIC.
Amenazas extremas
El hombre incluso relató al detective que “fantaseaba con volar un helicóptero Apache hasta la frontera y disparar contra los inmigrantes indocumentados que intentaban entrar a Estados Unidos para disuadir a otros inmigrantes indocumentados de cruzar la frontera”.
Cornett admitió que sus pensamientos podían ser motivo de acusación y describió sus fantasías violentas.
Sentencia y mensaje del DOJ
De acuerdo con las autoridades, Cornett fue condenado a cadena perpetua. La fiscal Harmeet K. Dhillon, de la División de Derechos Civiles del DOJ, señaló: “Nadie en este país debería ser perseguido y atacado a tiros por su identidad o procedencia”.
Añadió que la sentencia refleja el compromiso del Departamento de Justicia de proteger a las comunidades de la violencia motivada por el odio y responsabilizar a quienes atacan a otros por prejuicios.
