Redacción. Estados Unidos formalizó el nombre de su nuevo operativo militar en el Caribe. Bajo el título “Lanza del Sur”, el Gobierno estadounidense afirma combatir el narcotráfico, aunque esa justificación no ha sido demostrada. Las acciones incluyen el bombardeo de embarcaciones en las que, según datos oficiales, han muerto la mayoría de sus ocupantes. La presión contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro, también aumenta, según informó la Agencia EFE.
El secretario de guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, confirmó la operación a través de un mensaje en X. No ofreció detalles operativos. Solo aclaró que el despliegue estará bajo un grupo de trabajo conjunto y el Comando Sur, responsable de las misiones militares en el Caribe y en buena parte de América Latina.
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Un despliegue militar sin precedentes recientes
El anuncio llega tres días después del arribo al Caribe del portaaviones más grande del Pentágono, el USS Gerald R. Ford, acompañado de su grupo de ataque. La flota incluye más de 4,000 marinos y decenas de aeronaves. El buque se une a otros destructores, un submarino nuclear y varios escuadrones de combate ya desplegados en la región.
Desde agosto, Estados Unidos mantiene en el Caribe la mayor presencia militar de las últimas décadas. El operativo se enmarca en la supuesta lucha contra el narcotráfico y en los señalamientos directos contra el gobierno venezolano, al que Washington asocia con actividades criminales. Estados Unidos incluso ofrece 50 millones de dólares por información que permita capturar a Maduro.
Además, Washington ha confiscado activos del mandatario venezolano por más de 700 millones de dólares, al que acusa de liderar el Cartel de los Soles, catalogado por la administración Trump como “grupo terrorista”.
La ofensiva ha deteriorado la relación entre EE.UU. y Colombia. El expresidente Donald Trump acusó al mandatario colombiano Gustavo Petro de ser «narcotraficante», lo que tensó aún más el vínculo bilateral.
La escalada, paso a paso
A continuación, los principales hitos de esta ofensiva militar y diplomática, según la Agencia EFE:
8 de agosto: Trump autoriza el uso de la fuerza contra los carteles latinoamericanos, clasificados por su Gobierno como organizaciones terroristas.
2 de septiembre: Washington ejecuta su primer ataque contra una lancha. Asegura, sin pruebas, que transportaba once miembros del Tren de Aragua rumbo a Estados Unidos.
Hasta el 4 de noviembre, EE.UU. afirma haber hundido 17 embarcaciones y causado la muerte de 66 personas en el Caribe y el Pacífico.
5 de septiembre: Estados Unidos retira a Colombia de la lista de países cooperantes en la lucha antidrogas, lo que profundiza la crisis política entre ambos gobiernos.
Ese mismo mes, Washington revoca el visado de Gustavo Petro tras su participación en un acto propalestino en Nueva York durante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
28 de octubre: El despliegue naval estadounidense frente a las costas venezolanas alcanza su punto más alto desde la Guerra del Golfo (1990-1991).
31 de octubre: La ONU critica con dureza las acciones militares. El alto comisionado para los derechos humanos, Volker Türk, afirma: «Estos ataques, y su creciente coste humano, son inaceptables. Estados Unidos debe ponerles fin».
10 de noviembre: Según ABC, el Departamento de Guerra de EE.UU. envía tropas terrestres a realizar entrenamientos en la selva panameña. Es la primera vez que lo hace en décadas.
11 de noviembre: Venezuela anuncia la movilización de 200,000 militares en ejercicios de defensa ante “amenazas” de Estados Unidos, informó el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López.
14 de noviembre: Rusia pide a Washington evitar acciones que puedan desestabilizar la región “en torno a Venezuela” tras el anuncio de la operación «Lanza del Sur».
