Estados Unidos. Un hombre identificado como Erik Altamirano, de 31 años, fue acusado esta semana de cuatro cargos menores de agresión sexual, tras ser señalado el verano pasado por manosear y exhibirse ante al menos seis mujeres en varios vecindarios de San Diego, entre ellos University Heights, North Park y Pacific Beach.
Algunas víctimas publicaron en redes sociales fotos de un hombre que trotaba con pantalones cortos y una camiseta ajustada; más tarde, las autoridades lo identificaron como Altamirano. Aunque parecía un corredor habitual, varias mujeres denunciaron que el sujeto las tocó sin consentimiento y les mostró sus genitales, según reportó Telemundo San Diego.
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Altamirano fue arrestado en agosto y enfrentó inicialmente dos cargos graves de agresión con intención de cometer violación. En ese momento, se le impuso una fianza de 100 mil dólares. Sin embargo, antes de su comparecencia programada para el 31 de julio, la Fiscalía de Distrito derivó el caso a la Fiscalía Municipal, que decidió presentar cargos por delitos menores.
Su primera audiencia está fijada para el 25 de noviembre.
En agosto, NBC 7 habló con dos de las víctimas, quienes expresaron frustración al conocer la reducción de los cargos, aunque se mostraron aliviadas por el arresto del sospechoso.
“Se abalanzó sobre mí, me agarró el trasero y me lo apretó muy fuerte”, relató una mujer de Pacific Beach identificada como “Katie”.
Tras el ataque, ella llamó a la Policía de San Diego, que tomó su denuncia y la acompañó a su casa. Sin embargo, decidió continuar la búsqueda por su cuenta. Volvió al callejón donde ocurrió el ataque y pidió revisar grabaciones de cámaras de seguridad de los vecinos. Encontró vídeos claros del hombre con una camiseta azul y pantalones cortos oscuros.
Víctima difunde imágenes del agresor
Katie difundió las imágenes en redes y colocó folletos en el vecindario. Poco después, otras mujeres se comunicaron con ella para contar que también habían sido víctimas.
Otra de las denunciantes, identificada como “Rebecca”, narró que fue atacada un mediodía de agosto mientras caminaba en North Park. “Tenía la voz temblorosa, las manos temblorosas, no sabía qué hacer”, dijo a NBC 7.
Rebecca presentó la denuncia 20 minutos después del incidente y compartió su experiencia en la aplicación Nextdoor. En Instagram, descubrió un vídeo del agresor gracias a la publicación de Katie y decidió difundir la información y recopilar datos en internet.
La mujer recordó que el hombre se le acercó cerca del parque infantil de la escuela primaria Garfield. “Pasó corriendo junto a mí, dio la vuelta y regresó. Tenía una sonrisa burlona y se exhibió frente a mí. Había niños en el parque”, contó Rebecca.
El ataque cambió su rutina diaria. “Quería correr tras él, pero mi cerebro tomó el control y me paralicé”, dijo. Desde entonces, lleva un cuchillo y gas pimienta para protegerse.
“Ya no puedo caminar igual, al menos por ahora. Me quedo paralizada cuando veo la sombra de un hombre acercarse”, agregó.
