Redacción. Un hombre de Needham, Alabama, fue arrestado tras realizar llamadas y enviar mensajes amenazantes a rabinos, un imán y otras figuras religiosas en el sur de Estados Unidos, incluyendo a un rabino a quien le dijo: “quiero que mueras”, según reportó la agencia de noticias The Associated Press.
Jeremy Wayne Shoemaker, de 38 años, fue acusado de hacer amenazas por comunicaciones interestatales. Antes había sido arrestado por resistencia al arresto y posesión ilegal de armas.
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La Oficina Federal de Investigación (FBI por sus siglas en inglés) indicó que Shoemaker envió mensajes amenazantes a rabinos en Alabama y Luisiana, a un imán en Georgia, a una iglesia en Carolina del Norte y a otros líderes religiosos. Durante un registro en su casa, las autoridades encontraron múltiples armas de fuego, una maleta con municiones y documentos con los nombres, direcciones y teléfonos de líderes religiosos y figuras públicas.
Padece de una enfermedad mental
El hombre dijo al FBI que sus mensajes no eran amenazas reales, sino “un esfuerzo por intimidar o participar en una guerra psicológica”. Los documentos judiciales sugieren que Shoemaker tiene una enfermedad mental diagnosticada, y que había dejado de tomar su medicación, según indicó su abuela.
En una llamada reciente a un rabino en Mountain Brook, Alabama, Shoemaker afirmó: “Quiero que mueras porque deseas nuestra muerte. Quieres que Occidente desaparezca”.
En mensajes anteriores, Shoemaker escribió a un centro islámico en Luisiana: “Los judíos y ustedes, los musulmanes, nos han declarado la guerra de nuevo, y vamos a defendernos”. Otro mensaje a un imán de Georgia advertía que conocía su residencia y le instaba a tener cuidado.
El FBI aclaró que, según Shoemaker, las llamadas y mensajes eran “sátira, no una amenaza legítima” y una forma de intimidación psicológica.
Durante la intervención policial, se hallaron fusiles, escopetas, pistolas, chaleco antibalas y cajas de municiones en su vivienda. Shoemaker permanece detenido en la cárcel del condado de Choctaw.
Sara Jones, agente especial a cargo del FBI, destacó que múltiples agencias actuaron “dentro de horas de enterarse de una amenaza a un miembro de la comunidad judía” y resaltó que este caso muestra cómo la Policía puede proteger a la comunidad frente al crimen violento.
Por su parte, el abogado defensor de Shoemaker, Ernest C. McCorquodale III, se negó a hacer comentarios sobre los cargos. La Policía del Condado Clarke confirmó que el arresto se produjo gracias a la coordinación de varias agencias tras recibir reportes de amenazas creíbles contra sinagogas en Alabama y estados vecinos.
