Redacción. Los Gobiernos de Belice y Estados Unidos firmaron un acuerdo de tercer país seguro que permitirá a los migrantes permanecer en Belice mientras sus solicitudes de asilo se revisan en EE. UU., informó Diario El Salvador.
El Ejecutivo beliceño explicó que el acuerdo entrará en vigor una vez sea ratificado por el Senado de Belice, asegurando “el pleno cumplimiento de las obligaciones constitucionales e internacionales del país”. El convenio tendrá una duración de dos años y podrá ser cancelado por cualquiera de las dos naciones.
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El acuerdo se firmó el lunes. Participaron el Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Exterior, Cultura e Inmigración, Francis Fonseca. También estuvo la Encargada de Negocios de la Embajada de EE. UU. en Belice, Katharine Beamer.
“Basado en el compromiso de los Estados de cooperar en virtud de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951, el Acuerdo refuerza el compromiso de Belice con el derecho internacional y los principios humanitarios, al tiempo que garantiza sólidas salvaguardias nacionales”, destacó el Gobierno de Belice.
El país centroamericano subrayó que ninguna persona considerada una amenaza para la seguridad pública o nacional podrá ingresar o permanecer en Belice. Además, Estados Unidos podrá ofrecer, previa solicitud, asistencia financiera y técnica para fortalecer el sistema de gestión migratoria y de asilo en Belice.

Estados Unidos agradecido con Belice
Las autoridades estadounidenses expresaron su agradecimiento por la cooperación de Belice para reducir la migración irregular.
“Gracias al Gobierno de Belice por firmar un Acuerdo de Tercer País Seguro, un hito importante para poner fin a la inmigración ilegal, acabar con el abuso del sistema de asilo de nuestra nación y reforzar nuestro compromiso compartido de enfrentar juntos los desafíos de nuestro hemisferio”, publicó en redes sociales la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de EE. UU. (DHS).
Este año, países como Panamá, Costa Rica, El Salvador y Honduras también han recibido a migrantes deportados por Estados Unidos.

