Redacción. Ryan Routh, declarado culpable de intentar asesinar a Donald Trump en 2024 mientras el magnate aspiraba a la presidencia de Estados Unidos, intentó apuñalarse en el cuello con un bolígrafo dentro de una corte en Florida tras escuchar el veredicto del jurado.
El jurado encontró culpable a Routh, un trabajador de la construcción de 59 años, por intentar matar a Trump en un campo de golf en Florida el 15 de septiembre del año pasado.
Después de la lectura del veredicto, que también lo condenó por poseer un arma de fuego para cometer un crimen violento, atacar a un agente federal, ser un criminal con un arma y portar un arma con el número de serie borrado, Routh trató de apuñalarse en el cuello con un bolígrafo, según medios nacionales.
Las autoridades presentes en la sala evitaron que se infligiera daño y lo sacaron de la sala. Luego, regresó esposado para concluir el proceso, según relatos de testigos a varias cadenas de televisión.
Routh se defendió a sí mismo durante el juicio, ignorando las recomendaciones de la jueza que le sugirió contar con un abogado.
Durante las audiencias, la magistrada interrumpió a Routh en varias ocasiones y lo acusó de burlarse de la corte al hacer referencias a Adolf Hitler y al presidente ruso Vladímir Putin durante sus intervenciones.
Routh terminó su defensa el lunes sin prestar declaración y solo interrogó a tres testigos sobre su carácter no violento.

Sentencia
La sentencia definitiva se dictará en diciembre. La acusación por intento de asesinato contra un candidato presidencial podría derivar en cadena perpetua.
Routh fue arrestado el mismo día del atentado, luego de que un agente del Servicio Secreto lo descubriera oculto entre unos arbustos, armado con un rifle semiautomático. Aunque logró escapar brevemente, un ciudadano identificó el vehículo en el que huía, lo que permitió su captura pocas horas después.
Trump calificó el veredicto como “un gran momento para la justicia en Estados Unidos”, en un mensaje publicado en su red social Truth Social. Además, felicitó a la fiscal general, Pam Bondi, por haber logrado la condena de Routh.
El juicio comenzó el pasado 11 de septiembre, un día después del asesinato de Charlie Kirk, activista conservador de 31 años vinculado al expresidente. Trump culpó a la “izquierda radical” del crimen, reavivando así el debate nacional sobre la violencia política en el país.




