TEGUCIGALPA. En lo que va del año 2017 unos 107 menores de edad han sido abusados sexualmente. Así lo confirmó una radio capitalina, basándose en datos que posee el medio de comunicación.
También el medio informó que el 95 por ciento de los casos, el acto en contra de los menores son cometidos por allegados a la familia. Entre los agresores más comunes están los padres, tíos y primos de los menores de edad.
Asimismo, las edades en las que los menores están siendo más abusados son entre los cinco y diez años de edad. Por otro lado, la Fiscalía de la Niñez, dio a conocer que en el primer trimestre de 2017; el 45 por ciento de las denuncian ingresadas son por abusos sexuales en perjuicio de niños.
El código penal contempla la pena para el delito de violación contra menores de 15 a 20 años de prisión.
También puedes leer: Honduras: Más de 180 menores fueron evaluados por denuncias de violaciones
Impacto psicológico
Por su lado el impacto que puede tener el acto de una violación a un niño puede traer consecuencias a lo largo de su vida.
Un estudio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) sobre las consecuencias psicológicas de un menor que ha sido violado. El documento advierte que el abuso sexual causa estrés y se asocia a trastornos del desarrollo cerebral temprano.
Los casos extremos de estrés pueden alterar el desarrollo de los sistemas nervioso e inmunitario. En consecuencia, los adultos que han sufrido abuso sexual en la infancia corren mayor riesgo de sufrir problemas conductuales, físicos y mentales.
Estos van desde los actos de violencia, ya sea como víctimas o como perpetradores, cuadros de depresión. Así como consumo de sustancias perjudiciales a su salud y obesidad debido a cuadros de ansiedad.
El estudio también dice que a través de estas consecuencias en la conducta y la salud mental, el maltrato puede contribuir a las enfermedades del corazón, al cáncer y a las infecciones de transmisión sexual.
Impacto económico
Además, el mismo estudio de la OPS, señala que el ser abusado sexualmente trae consecuencias económicas. Lo anterior, según el estudio, se da a raíz de la inversión económica para tratar las secuelas del abuso sexual.
