OLANCHO, HONDURAS.- Pobladores de Salamá, Olancho, aseguran que un niño está «poseído» por demonios por jugar Free Fire. Según el relato de los vecinos y familiares, el jovencito es adicto a jugar este videojuego, el cual es el responsable de su estado.
En un video divulgado en las redes sociales, se ve a un grupo de personas cristianas orando por la liberación del joven. Mediante oraciones y cantos, ellos intentan calmarlo y ayudarlo con el «problema espiritual» en el que, según ellos, se encuentra.
Asimismo, se observa que el jovencito de unos 15 años con identidad no establecida, permanece con las manos atadas con sogas. La reunión se realiza en la casa del adolescente. Además, los vecinos explicaron que lo tuvieron que amarrar para evitar que se lastime y agreda a sus familiares.
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Familiares viven situación tormentosa
Los amigos y vecinos cercanos aseguran que para la familia del jovencito la situación se ha vuelto tormentosa. Asimismo, hicieron un llamado a los padres de familia para que eviten que sus hijos se entretengan con el videojuego y que en su lugar les enseñen a practicar un deporte al aire libre.
En el video, también se observa cómo el menor dice unas palabras, tratando de recuperar su conciencia y que el demonio abandone su cuerpo, mientras las demás personas oran alrededor de él.
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VEA EL VÍDEO
Videojuegos que afectan a los niños
Esta situación ha dejado un complejo debate entre los padres de familia. Pues algunos dicen que no es seguro dejar que los menores pasen demasiado tiempo jugando estos videojuegos.
Algunos miran esta actividad como algo inofensivo, incluso dicen que estimula la concentración. Sin embargo, otros padres difieren de esta opinión y argumentan que los videojuegos fomentan la violencia y generan adicción.
En ese sentido, los psicólogos recomiendan a los papás no permitir a sus hijos el uso por muchas horas de un dispositivo de video.
Según los especialistas esto «causa muchos daños psicológicos, ya puede ser por muchas sensaciones que les producen».
Asimismo, cientos de instituciones han elaborado diferentes estudios al respecto y han acordado que estos desencadenan crisis convulsivas en niños. La causa de estas crisis se debería a los destellos y cambios en la intensidad de los colores.
Algunas recomendaciones que pueden seguir los padres son:
- Controlar el tiempo dedicado al juego
- Vigilar el contenido de los videojuegos que juega su hijo
- Estimular la vida y actividades en familia
- Detectar situaciones de peligro o violencia.
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