SANTA BÁRBARA, HONDURAS. Gerardo Soriano Salvador, de apenas cinco años de edad, es un niño que murió apuñalado cuando trató de defender a su mamá de su expareja en la comunidad de Salitre, en Santa Bárbara.
Al pequeño lo agredió el jornalero Juvencio Hernández, de 57 años de edad. Las autoridades sostienen que la causa del hecho fueron problemas pasionales, pues el responsable llegó a la vivienda de Nely Salvador y miró a otro hombre ahí.
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Vitalina Pineda, maestra del niño, lo describió como un alumno bastante inteligente, «chispa», que no le faltaba a clases, activo, comunicativo y además destacó que la madre es muy responsable.
«Este año me salía de preparatoria. La mamá me decía: profesora, yo voy a trabajar duro para que mi niño salga este año y hagamos un buena clausura», agregó.
Pero explicó que nunca se imaginaron que el destino del pequeño fuese a terminar de una forma tan trágica. Asimismo relató que solo pide a Dios que le dé fuerza a Nely Salvador.
«Y a mí también porque me ha afectado mucho la muerte de Gerardito», añadió.
La maestra contó: «Él me decía que quería ser policía», y ella le preguntaba el porqué. «Porque a mi mamá la miran mal mis abuelos (paternos)», le confesó el menor.
El responsable se intentó suicidar
También la hondureña precisó que siempre le comentaba los problemas que ocurrían en su casa. Los vecinos relataron que Nely hace unos 15 años se había ido a vivir a la zona donde ocurrió el hecho, porque la maltrataban los parientes de su actual esposo.
Según testificaron, el conflicto recae en que la familia de la pareja de Nely, quien hace cinco años emigró a México, la señalan porque supuestamente anda con otros hombres, entre ellos, Juvencio Hernández.
Una de las vecinas afirmó que ella fue a la casa de Nely y observó que Juvencio estaba en el patio con un semblante enojado. Además, expresó que en un momento, la hondureña le dijo con voz baja y con temor que: «allí estaba Mencho».
Tras el hecho, cuando agentes policiales llegaron revelaron que Hernández estaba queriendo quitarse la vida e intentó agredirlos, pero ellos lo sometieron.
Al niño apuñalado en Santa Bárbara intentaron salvarle la vida llevándolo a un centro asistencial pero fue después de estar horas ingresado, los médicos confirmaron su muerte.
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