Redacción. Una casa de subastas británica captó la atención global al anunciar la venta de un lote excepcional de objetos personales pertenecientes a Frederick Sutton, un pasajero de primera clase que pereció en el hundimiento del Titanic en abril de 1912.
La colección, con un valor de más de cien mil dólares, está generando un intenso interés por su inigualable estado de conservación y su profundo significado histórico.
Sutton, un empresario originario de Suffolk y residente en Nueva Jersey, viajaba en el camarote D-50 cuando ocurrió la tragedia. Tras el naufragio, sus restos y pertenencias fueron recuperados por el buque de salvamento CS Mackay-Bennett.
La particularidad de este lote es que los artículos fueron resguardados directamente por la familia Sutton durante más de un siglo, lo que le otorga una trazabilidad completa y multiplica su valor comercial e histórico.
Le puede interesar: Casi un millón de filipinos evacuados por supertifón Fung-wong

Entre los artículos más destacados se encuentran un elegante reloj de bolsillo con su cadena, un alfiler de corbata, un anillo grabado con sus iniciales, tres cucharas de plata, una navaja, un pequeño libro e incluso un monedero que aún contiene trece dólares. También se incluye una bolsa confeccionada a bordo del buque de rescate, utilizada para envolver los cuerpos recuperados.
Dos etapas
La subasta se llevará a cabo en dos etapas. La primera fase está programada para noviembre de 2025 en el Reino Unido. La segunda se realizará en abril de 2026, coincidiendo con un nuevo aniversario del icónico transatlántico.
Especialistas del mercado de coleccionismo señalan que el interés por el Titanic, uno de los episodios marítimos más emblemáticos del siglo XX, se mantiene intacto. La escasez de piezas auténticas vinculadas directamente a los pasajeros de primera mano garantiza que su cotización continuará en ascenso.
Se espera una fuerte puja entre coleccionistas privados, museos y fundaciones dedicadas a la memoria de la tragedia.



