Redacción. «Es difícil ser joven y no lograr informarse bien sobre la aplicación de un medicamento», fueron las desgarradoras palabras de Kenia, quien relató su experiencia usando la Pastilla Anticonceptiva de Emergencia (PAE).
En una emotiva entrevista para Diario Tiempo, Kenia, una joven de 28 años, compartió su triste historia de cómo una pastilla prácticamente le ha quitado el sueño de ser madre a tan corta edad.
«Yo empecé a tener relaciones a partir de los 13 años, y pues ahí me di cuenta de que era alérgica a varios métodos anticonceptivos. Una amiga me recomendó la PAE como método anticonceptivo, sin darme cuenta del daño que estaba haciendo en mi cuerpo», relató Kenia.
Kenia mencionó que en ningún momento tuvo la idea de consultar un doctor o averiguar sobre la píldora. Es más, reveló que ella ingería hasta cuatro píldoras por mes, pensado que no le iba a traerle ninguna afectación.
«Yo en el tiempo que la usé, que fueron más de 6 años continuos, pues nunca sentí algún dolor o problema. A mí me venía el periodo (menstruación) normalmente, tenía relaciones y al día siguiente tomaba la pastilla«, dijo Kenia.
Afectaciones a lago plazo
Según este joven, las consecuencias de utilizar la PAE las comenzó a sentir hace tres años, cuando decidió no usar ninguna protección para poder quedar embraza. Sin embargo, tras varios intentos, Kenia no lo conseguía.
Ante esta problemática, Kenia narró que acudió a un especialista, quien, después de varios estudios, le informó que la píldora anticonceptiva que había usado durante seis años había dejado secuelas en su salud reproductiva, impidiéndole quedar embarazada.
“Nunca imaginé que algo tan pequeño, algo que tomaba a diario, podría cambiar mi vida de esta manera. Es devastador, siento que me robaron la oportunidad de ser madre”, compartió visiblemente afectada.
Kenia no es la única mujer que ha experimentado efectos secundarios inesperados debido a las anticonceptivas. Aunque no son pocas las mujeres que usan estos métodos para prevenir embarazos no deseados, en algunos casos, los efectos a largo plazo pueden tener consecuencias en la fertilidad.
Los médicos han señalado que, aunque los efectos secundarios son raros, es fundamental que las mujeres se informen adecuadamente sobre los riesgos antes de optar por estos métodos.
A pesar de la dura noticia, Kenia no pierde la esperanza de algún día cumplir su sueño de ser madre, aunque ahora enfrenta un camino lleno de incertidumbre. A través de su testimonio, hace un llamado a las autoridades para que se ofrezcan más alternativas y se brinden mejores opciones de información y apoyo a las mujeres que desean planificar su maternidad.
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