TEGUCIGALPA, HONDURAS. En las últimas horas se reportó un atentado que dejó como resultado un hombre muerto y otro herido en la ciudad capital, Tegucigalpa, en la zona central de territorio nacional.
La víctima fue identificada como Josué Gerardo Herrera Dubón, de 32 años, quien laboraba para una institución estatal.
De acuerdo con la versión preliminar, los hombres se encontraban conversando en un parqueo de la colonia Modesto Rodas, cuando dos desconocidos a bordo de una motocicleta procedieron a dispararles.
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Herrera Dubón intentó protegerse debajo de un automóvil, sin embargo, uno de los sujetos armados se percató y se acercó para quitarle la vida en esa posición.
De igual forma, la persona con la que platicaba la víctima mortal del ataque decidió correr de la escena y se pudo resguardar en un sector aledaño. Luego, el herido ingresó a la sala de emergencia del Hospital Escuela y hasta el momento su estado de salud está clasificado como «reservado».
Elementos de la Policía Nacional (PN) y de Medicina Forense llegaron al lugar para realizar el levantamiento cadavérico como lo indica la ley hondureña.
Asimismo, los agentes comenzaron la investigación para dar con el paradero de los sujetos que acabaron con la vida del hombre. Hasta el momento, las autoridades no tienen una hipótesis sobre el motivo del crimen que enlutó a una familia más en el territorio nacional.
El cuerpo sin vida de Josué Gerardo Herrera se encuentra en la morgue de la capital mientras sus familiares lo reclaman.
Otro hecho violento en la capital
El pasado viernes, una pareja de sicarios le quitó la vida de manera violenta a un supuesto extorsionador en la colonia Mayangle de Comayagüela.
La víctima no fue identificada luego del hecho, sino hasta que lo trasladaron a las instalaciones de Medicina Forense, por lo que informaron que se trata de Carlos Antonio Borjas Lagos, de 20 años de edad.
Según los informes policiales, los sicarios iban bordo de una motocicleta y le arrebataron la vida a Borjas, mientras realizaba una ronda de cobro de extorsión en la zona.
Carlos era supuesto integrante de una estructura criminal distinta a la que opera en la zona donde fue acribillado.
El cuerpo del fallecido quedó tendido en el pavimento, tenía puesto un casco color rojo, ya que se transportaba en una motocicleta. Además, la víctima vestía un jean azul y tenis negros.
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