CORTÉS, HONDURAS. Unas 40 mujeres embarazadas han muerto por COVID-19 solo en San Pedro Sula, según revelaron autoridades regionales del Colegio Médico de Honduras (CMH).
Oscar Sánchez, delegado presidente del gremio médico en el departamento de Cortés, dijo que existe preocupación por la alta transmisibilidad del mortal padecimiento en esta población.
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Además, aseguró que los casos aumentan y ante ello debe haber más compromiso con la bioseguridad. «Para nosotros, como Colegio Médico y como miembro de la sociedad de Ginecología y Obstetricia de Honduras, nos preocupa enormemente ver un aumento de casos de COVID-19 en mujeres embarazadas», externó el galeno.
Asimismo, el profesional indicó que, además del COVID-19, también se tiene que luchar contra las antivacunas. El médico aseveró que, a más de un año de pandemia, todavía se tiene que seguir educando a la población.
Afirmó que que hay familias enteras que se niegan a inmunizarse contra el COVID-19. Ante ello, los doctores determinan que es «solo mala información o en algunos casos ignorancia».
Mujeres en estado de gestación
De acuerdo con el Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) de la Secretaría de Salud, la vacunación de las mujeres embarazadas en Honduras no ha dado los resultados que esperaban.
Las autoridades sanitarias establecieron como meta inocular a 149,003 mujeres embarazadas y apenas han vacunado alrededor de 18,961. Esas pocas gestantes que se han aplicado la vacuna contra el COVID-19 representan solamente el 12 % de la meta que propuso Salud con respecto a ese grupo prioritario.
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