SAN JOSÉ. – El ambiente, la belleza y el color, no podía ser mejor en el marco del Clásico centroamericano entre Costa Rica y Honduras.
En medio de la emergencia nacional producto de la Tormenta Tropical Nate que dejó mucho luto y dolor en Costa Rica, el fútbol viene a olvidar un tanto la tragedia.
Desde muy tempranas horas del día, las principales calles adyacentes al estadio se han llenado de múltiples colores. Y no es para menos.
La asistencia del público, está asegurada. Costa Rica se prepara para una larga noche de festejos con una eventual clasificación esta misma tarde ante el equipo catracho.
A los ticos les basta un punto para poder arreglar maletas y marcharse a Rusia, una eliminatoria que ya tiene a México como único invitado asegurado.
El segundo y tercer boleto para Rusia, aún está en juego. El cuarto Lugar también está en disputa.
El juego comienza a las 4:00 de la tarde.