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martes, abril 23, 2024

Monseñor explica la importancia de la oración en la vida

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Tegucigalpa.- La importancia de la oración fue el tema que se tocó en la homilía de este domingo 16 de octubre, la cual se realizó en la Basílica de Nuestra Señora de Suyapa, en la capital de Honduras.

El evento religioso contó con la participación del obispo auxiliar, el monseñor Teodoro Gómez, quien habló de la importancia que es tener un contacto constante con el padre celestial.

“Hay que orar siempre sin desanimarse, ya que la oración es la que sostiene nuestra relación con Dios”, explicó.

Sin oraciones la fe se tambalea 

Expuso que las personas siempre deben orar, pues esto nutre al alma, de lo contrario, sin oraciones, la fe se puede debilitar o incluso perderse.

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Cada domingo, miles de feligreses asisten a la Iglesia católica para escuchar la homilía, que se realiza en la Basílica de Suyapa.

El monseñor manifestó que la fe es un poder que se menciona mucho en la Biblia, eso sucedió teniendo en cuenta que en los tiempos de Jesús, tener fe y orar era fundamental para ser feliz.

Argumentó que el orar ayuda a que las personas no solarmente sean fuertes espiritualmente, sino que también impulsa para que el mundo sea un lugar sin oscuridad.

El líder de la Iglesia católica dijo que el señor no es sordo y que siempre escucha las plegarias de sus hijos.

«La oración nos hace tomar conciencia de nuestra vida, la oración es liberadora. Sin la oración nos perdemos y nos desanimamos», aseveró.

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La homilía se realizó en la Basílica de Nuestra Señora de Suyapa, Tegucigalpa.

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Siempre hay tiempo para la oración 

El monseñor Teodoro Gómez, también indicó que a veces las personas dicen no tener tiempo para orar. No obstante, afirmó que de una u otra forma, siempre se puede hacer un espacio.

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Asimismo, puntualizó que hay que tener cuidado cuando existe el desánimo para orar, porque eso es una trampa para alejar el espíritu del padre celestial, por lo que indicó que cuando eso se apodere de uno, más se debe orar.

“Cuando ya nadie me escucha, Dios todavía me escucha, siempre puedo hablar con Dios”, concluyó el monseñor en un mensaje que conmovió a varios de los presentes.


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