EUROPA – Si algo le faltaba a Cristiano Ronaldo, que la pasa mal fuera del campo de juego por sus enfrentamientos con la prensa, era la aparición Amal Saber. La modelo marroquí, de 26 años, posó semidesnuda para la revista Interviú y reveló intimidades vividas junto al portugués, quien en ese entonces todavía estaba de novio con Irina Shayk.
Según Amal, quien nació en Nador pero llegó muy pequeña a España en barco, conoció a la estrella del Real Madrid una noche de abril de 2014 en el restaurante Banloo de Madrid, un lugar exclusivo cercano al Santiago Benabéu.
Fue una cena muy divertida. Cristiano fue muy simpático. Se tomaba muy bien las bromas. Me dijo: ‘A mí no me gustan las rubias, pero tú sí’. Tuvimos una conexión estupenda. Luego bajamos a tomar una copa, había más jugadores y chicas de la tele. Le dije que yo me iba, que no me sentía bien, y dijo: ‘No, vamos a mi casa’. Mi hermana y yo nos montamos en el coche del amigo y él fue solo en el suyo», detalló la bella modelo.
Entonces comenzó la noche íntima entre ambos. Ella cuenta que quedó sorprendida por los detalles que el futbolista tiene en su mansión de La Finca. Amal quedó maravilla con los perros del jugador, porque «las casitas donde dormían tenían calefacción».
«Estuvimos abajo, donde tiene un jacuzzi. Estaba un poco bebida. Luego entramos en su habitación y tenía una cama, una tele grande y, al lado, una foto de Irina Shayk. Bebimos champán de melón, que dijo que le había sobrado de su cumpleaños. Estuvimos juntos hasta las cinco de la mañana. A esa hora, su amigo nos llevó a mi hermana y a mí a casa», confesó a Interviú.
Desafortunadamente para ella, el amorío no duró mucho tiempo. No está segura de si Irina descubrió que CR7 le era infiel o si fueron sus amigos los que no querían se siguieran viendo, pero lo único cierto es que semanas después Cristiano la bloqueó y todo terminó.
De todas formas, ese no fue el único encuentro y Amal Saber cree que Ronaldo tiene buenos recuerdos de su fugaz relación: «Aquella noche fue muy especial; luego hubo más, pero esa fue la más especial, no la olvidaremos ninguno, porque los dos fuimos muy cariñosos».
